Empiezan las comparativas en la Next-Gen

Por aquí y por allá estamos ahora probando los juegos de ambas consolas -Xbox One y PS4-, comprobando qué diferencias encontramos en cada versión. A priori podríamos pensar que, con la similitud del hardware que nos han mostrado durante la presentación de ambas, el resultado será el mismo. Pero algo debe diferir en cuanto a su rendimiento y siempre encontraremos alguna comparativa que nos saque de dudas.

 

Así nos hemos encontrado con que Call of Duty Ghosts, por ejemplo, en su versión de Xbox One difiere de en varios aspectos. Notamos mucha más iluminación pero menor definición de texturas y nos choca. No es el único ejemplo ya que, aunque menos destacado, Battlefield 4 también se ve mejorado en la plataforma de Sony. Assassin´s Creed IV ha recibido actualizaciones que amplían su resolución, mientras que la versión de la consola de Microsoft se queda tal cual. 

 

Es curioso porque vimos como unos y otros se alzaban tratando de no ser menos en una guerra que tenía como fin ganarse un sitio en nuestras carteras. Nos encontramos en el comienzo de una etapa donde podríamos pensar que ambas plataformas van sobradas con su potencia -y no vamos desencaminados. Ya encontramos -como pasó con PS3 y Xbox 360- ciertas diferencias en algunos juegos que no es que sitúen una consola sobre otra, simplemente muestran un comienzo algo accidentado para una de ellas. Por contra, esto no quiere decir que veamos mal los juegos en Xbox One. Sólo notamos que algunos multiplataforma destacan en la consola de Sony.

 

 

Realmente Microsoft ha sido capaz de hacer una máquina en la que sus juegos se ven muy bien. De este modo encontramos a Ryse, en el que el nivel de detalle y la forma en que nos introduce en sus escenarios no tienen queja -ya sabéis dónde recaen. Forza es otro de esos títulos que muestran las capacidades de la consola a la altura de ofrecer una auténtica nueva generación. Simplemente nos sorprende habernos encontrado algunos títulos éxito de ventas que quedan algo por detrás de PS4.

 

Seguramente nos esperen muchos años en los que veremos juegos multiplataforma llegar y múltiples comparativas. Y es realmente deseable que Microsoft destaque en buena cuenta de ellos. Ya hemos leído y escuchado la opinión de varias desarrolladoras que afirman que Xbox One es una gran consola que tiene mucho que dar de cara al futuro. Esperemos que pronto podamos jugar a algún juego en el que ninguna comparativa sea capaz de mostrar diferencia o que incluso incline la balanza al lado opuesto. De todos modos, sobre todo habiendo probado ambas consolas, podemos estar contentos con ambas versiones. Unas tienen mejores texturas y otras destacan por su iluminación. Deberemos comprobar si con el tiempo estas características no van distanciándose en una con respecto a la otra.

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