El regreso de Flashback... y el miedo a la vejez de Cuisset

El otro día se cuestionaba por aquí nuestra compañera María la necesidad de que se realicen remakes de videojuegos clásicos más allá de factor económico. En esto que se citaba un nuevo Flashback que está a punto de caernos, con el fastuoso anuncio de que el equipo responsable del título original estaría al cargo de este nuevo regreso. Sin duda una buena noticia para aquellos que disfrutamos en su momento del que fuera uno de los lanzamientos estrella de la recordada Delphine Software.

Curioso es que hace escasos días también os hablara del Another World de Eric Chahi, obra y creativo afines igualmente a la citada compañía francesa. Pero ahora, Paul Cuisset, el que fuera uno de los máximos responsables de Delphine, es el que vuelve a coger la batuta para volver a dirigir su propia obra adaptada a los tiempos actuales; un movimiento ciertamente arriesgado si la cosa no sale como debiera. Creo que por eso mismo un genio como Ron Gilbert no se atreve a volver a pisar los entornos aventureros tal y como lo hiciera en la vieja LucasArts, intentando rizar el rizo por vías alternativas a la usanza de The Cave.

Delphine International se fundó en el año 1988, si bien Cuisset ya había trabajado en títulos como las versiones Atari ST y Amiga de Operation Wolf, realizándole a su amigo Jean Baudlot la aplicación para que desarrollara las músicas del juego. Nuestro hombre, máximo responsable de la empresa, tomaba las riendas de la mayoría de los proyectos no solo como diseñador, sino programando la mayoría de los lanzamientos. Así, y tras un experimental juego de acción llamado Bio Challenge, lideró el desarrollo de una serie de aventuras gráficas que trataban de sumarse al éxito de LucasArts en el género. Así, y bajo lo que se denomino como técnica 'Cinematique', vieron la luz joyas como Future Wars, Operation Stealth y Cruise for a Corpse, juegazos que triunfaron en ST, Amiga y PC.

En cierto modo influenciado por su amigo Eric Chahi, Cuisset desarrolló Flashback con las videoconsolas en mente, aunque también fueran importantes en su lanzamiento las computadoras de 16 bits. Con la sombra de Another World tras de sí (muchos eran los que decían que Flashback era su secuela), Delphine realizó un maravilloso juego que cogía mucho de Prince of Persia y lo elevaba a la enésima potencia añadiéndole un diseño de niveles majestuoso y un factor de ciencia ficción que le sentaba de lujo. Era de esperar que se convirtiera en el clásico que es, después de impresionar a propios y extraños luciendo palmito, además de en las plataformas habituales, en sistemas tan dispares como 3DO, Acorn Archimedes, CD-i, Mega CD, FM Towns o Macintosh.

Después de Flashback, el ritmo de producción de Cuisset se frenó sobremanera, plasmando dos años después de su obra maestra un Shaq-Fu que se recuerda como uno de los peores juegos de lucha de todos los tiempos. Por suerte, tuvo la oportunidad de redimirse con Fade to Black, secuela directa de Flashback que innovaba al meterse en los antaño pantanosos terrenos de los juegos en tres dimensiones, en plena era PlayStation. Antes de que Delphine entrara en bancarrota, hizo popular el mundo del motociclismo en los videojuegos con las tres entregas de Moto Racer, potentes arcades de carreras que no evitaron en 2004 la bancarrota de la empresa. En el tintero se quedó un Flashback Legends que tenían entre manos junto a la subsidiaria Adeline Software.

Después de tanto tiempo, la buena noticia de que Cuisset retome las riendas de Flashback para devolverlo a la actualidad es sin duda de lo más destacable. Se ha puesto especial énfasis en que el núcleo del equipo original estará involucrado en el desarrollo del remake, pero... dirigiendo nuestras miras unos meses atrás, podremos percatarnos de que Cuisset y su equipo en Vectorcell fueron los responsables de Amy, aquel pretendido juego de terror que, más allá de un auténtico despropósito, se quedó en una de las mayores decepciones de lo que llevo de generación. Y recordad que se anunció de la misma manera: de los creadores de Flashback. ¿Pierden los veteranos su habilidad con el paso del tiempo? ¿Se quedan atrás los buenos hábitos? Amy dejó a las claras la dejadez y desidia de Cuisset... veremos a ver qué pasa ahora.