El nuevo gameplay de Dragon Ball Z: Kakarot promete un juego largo
Cuando conocimos que el nuevo proyecto de Cyberconnect2 se llamaba Dragon Ball Z: Kakarot, todo nos hacía pensar en un juego contenido, en un lanzamiento que iba a coger las dos primeras sagas de la serie (Sayan y Namek) y las iba a adaptar al videojuego. El nombre también apoyaba esa idea, porque si la cosa se iba a centrar en Goku parecía complicado alargar el chicle hasta las partes de Cell y Buu, donde nuestro superhéroe tiene una presencia modesta, reservada a los grandes momentos.
Pero parece que el estudio japonés se las va a ingeniar para añadir, como mínimo, también la parte de los androides. En la Gamescom hemos podido ver a Gohan en el combate final contra Cell y como personaje controlable, y también cositas como a padre e hijo entrenando durante los días previos a dicho torneo. Rellenito, pero del bueno. Mediante estos últimos detalles es fácil empezar a imaginar la magnitud de este juego, y no es precisamente pequeña.
Estos 17 minutos sirven para ver que tendremos varias cosas que hacer antes de avanzar en la historia, que habrá varias secundarias repartidas por el mundo centradas principalmente en luchar, subir de nivel y fortalecer a Goku; pero habrá otras más variopintas, como la que recreará el capítulo en el que se saca el carné junto a Piccolo. No me quiero olvidar de los jefes, el plato principal del menú. Me gusta que estén planteados como enfrentamientos de una duración relativa, siendo combates con toques de shmup -en lo referente a esquivar las salvas de ki rivales- y con elementos RPG simples pero bien encajados.
Vuelven los jefes con distintas barras de vida, uno de los elementos que mejor funciona en la adaptación de los combates de Dragon Ball al videojuego. Es una manera fácil para plasmar la escala de poder y de dividir el combate por tramos que nos vayan contando la historia, y también una forma inteligente de dividir la lucha por fases en las que el rival se vaya volviendo cada vez más agresivo y contundente. Estos segmentos tienen que ser lo que mejor funcione del juego, y por ahora no pintan mal.
Lo más prometedor es lo visto en este combate contra Cell, donde podemos verle realizar varias técnicas específicas que buscarán pillarnos por sorpresa y nos obligarán a aprender a esquivar bien. Si Dragon Ball Z: Kakarot tira por aquí, por los enfrentamientos cambiantes mediante múltiples rutinas y enemigos que van enfureciéndose, podríamos estar ante uno de los mejores juegos de la serie dentro del control en tercera persona. Porque si hablamos del 2D, ya imagináis que el trono lo tiene otro.
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