El mod de Dark Souls Daughters of Ash, otra razón para volver a Lordran
Todas las primeras partidas de Dark Souls tienen algo especial, único, que se pierde con las siguientes. Lógicamente, no es algo que pasa solo con la saga de From Software, pero sí que es un factor que se acentúa en casos como este o, por ejemplo, en experiencias como Hitman. La primera vez es un continuo descubrimiento, una prueba que pone en alerta tus estímulos, tu capacidad de reacción, tu intuición; luego la experiencia cambia y ya entran más en juego factores como la memoria o el posicionamiento.
Revisitar Lordran tras vencer a Gwyn es casi una vuelta a casa, pero gracias a la comunidad modder ese regreso puede conservar parte del espíritu de la partida primeriza. Dark Souls Daughters of Ash es un mod que cambia el original más de lo que Scholar of the First Sin rejuveneció a Dark Souls II. Aquí hablamos de un lavado de cara bastante más radical, pero que nunca llega a pasarse de la raya.
Según la descripción oficial del mod, este archivo de cambios añade un nuevo posicionamiento de los enemigos y los objetos, nuevas armas, jefes y hasta la inclusión de zonas que fueron descartadas del juego original. Casi nada. Lo bueno de todos estos cambios es que aún hay que conocerlos en profundidad, debido a que la gente apenas ha empezado Daughters of Ash y a que su propio creador comenta que la cantidad de novedades es tal que no es posible verla en una sola partida. Esto es nuevo para todos.
Hasta donde he podido jugar, todo son agradables sorpresas. En la zona inicial se respeta el tutorial, pero ya se ofrecen un par de pinceladas de lo que está por llegar, con el Demonio del Refugio y con un par de objetos equipables, que ni actúan ni se encuentran donde y cómo deberían originalmente. La cosa empieza a ponerse interesante cuando llegas a la hoguera principal, tires por donde tires, porque las ruinas de Nuevo Londo están cambiadas, el Burgo de los No Muertos pierde la hoguera intermedia que facilitaba el camino hasta el Demonio de Tauro y, ojo a esto, obtienes llaves que permiten acceder a zonas desde caminos alternativos al habitual. La progresión cambia.
Hay modificaciones más sutiles pero igual de efectivas, como por ejemplo que algunos enemigos deciden atacar con su embestida con salto nada más verte, lo cual te obliga a estar muy pendiente de cuándo y desde dónde te ven. Quizás lo más destacable de este mod, hasta donde he visto, es que tiene más intención de reinterpretar Dark Souls con sus mismas herramientas que de, simplemente, elevar la dificultad rompiendo su curva natural. Por ahora, le estoy encontrando razones de peso a cada cambio.
Esa mezcla entre lo familiar y lo desconocido es lo que hace tan especial a Daughters of Ash. En muchos sentidos, se ha conseguido revivir el primer Dark Souls avivando su llama y devolviéndole ese descubrimiento continuo que solo tienen las primeras partidas. Solo hace falta hacer una busca rápida para ver que no son pocos los que han caído de nuevo en sus redes, y hasta el momento la ocasión os garantizo que lo merece.
Un par de avisos: jugad en offline para que no se rompa el mod cuando alguien os invada y (por el momento) hablamos de un parche que se aplica a la versión Prepare to Die, aunque está previsto que llegue al remaster. Que la luz de la primera llama os guíe.
<< Anterior Siguiente >>