El juego de cartas de The Binding of Isaac desata la locura

The Binding of Isaac nos sorprendió por primera vez hace casi siete años. A finales de septiembre de 2011 se estrenaba en Steam gracias a Edmund McMillen y Himsl Florian, pero las sorpresas no han parado desde entonces. Tras el lanzamiento el pasado año 2017 de Afterbirth, McMillen ha vuelto a sorprendernos con The Binding of Isaac: Four Souls, que lejos de ser una secuela es, en realidad, un juego de cartas. No un videojuego, no, sino un juego de mesa.

 

Hay más, sí. La sorpresa no es que hayan anunciado el juego, que también. La sorpresa es que se anunció oficialmente esta mañana y que una hora y media más tarde había superado con creces su meta de financiación en la página de Kickstarter. Al momento de escribir estas líneas, y sin que la cifra deje de crecer, The Binding of Isaac: Four Souls lleva acumulada la friolera cantidad de 271.787 dólares, como veis bastante por encima de su meta de 50.000 dólares. Oh, acaba de cambiar. Y otra vez. BASTA. Ahora mismo hay un total de 3787 patrocinadores. A Four Souls le quedan todavía 29 días para que termine la campaña. ¿Qué leches ha pasado aquí?

 

Con o sin sus revisiones, The Binding of Isaac nos fascinó. El juego diseñado por McMillen puede no ser del gusto de todos. Sangre, vísceras, cacas y moscas no son precisamente elementos bonitos, pero la historia del pobre Isaac tampoco lo es. El juego en sí es un roguelike lleno de mazmorras que van cambiando aleatoriamente. No es que sea precisamente algo súper innovador (recientemente hemos podido ver esto mismo en Moonlighter), pero nos gustan esas hordas de enemigos aterradores que pueden matarnos con solo mirarnos. En cuanto al juego de mesa, tampoco parece nada innovador… pero, qué os voy a decir, es Isaac. Compraría lo que haga falta.

 

Four Souls responde a la mecánica de que cada jugador cogerá una carta de personaje. A su vez, cada personaje contará con distintas habilidades. También tendremos objetos iniciales, como un dado de 6 o el Libro de Belial. También encontraremos cartas durante el juego, y las hay de todo tipo. Por un lado están las aberraciones que ya conocemos y a las que tendremos que enfrentarnos, y por otra los hechizos, las trampas, y, en fin, todo lo que Isaac nos ofrecía en videojuego, ahora en forma de cartas.

 

Si sois fans de The Binding of Isaac y de los juegos de mesa, no perdáis más el tiempo y meted pasta en el Kickstarter. Más que nada porque hay recompensas limitadas y, bueno, puede que no lleguéis a tiempo. Ah, mirad, ya va por 275.280 dólares recaudados. Dios mío, esto es una locura.

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