El futuro de Wii U está fuera del salón

Puede parecer una tontería, pero el Off-TV tiene muchos más usos posibles que el eternamente comentado de llevarse la Wii U al cuarto de baño. La idea de jugar a un juego de sobremesa sin acaparar la televisión o jugar desde la cama como quien lee un libro sin dejarse los ojos en el intento son algunos de los usos domésticos, pero ¿cómo funciona Wii U como consola portátil?

Portátil del todo no es, ya que por el momento no es una consola con batería autónoma sino que requiere de, como mínimo, un enchufe para jugar. Pero sí, no habría ningún problema en llevarse la consola y el mando en una bandolera, enchufarla en cualquier cafetería y ponerse a jugar. Pero eso no es portátil.

Pero el enchufe es lo único que separaría a Wii U de un dispositivo portátil en vista de que hoy en día cualquiera lleva un bolsito del que en un instante saca su ordenador portátil o su tablet y se pone a escribir, navegar o jugar, y puestos a entrar en comparativas si de lo que hablamos es de juegos, Wii U es una opción mucho más barata que las que se ven habitualmente.

Gracias a un impresionante reportaje de Digital Foundry descubrimos un nuevo accesorio que potencia una de las bondades de Wii U con respecto a su competencia, como es el escaso gasto energético de la consola, que le permite ser alimentada a través del encendedor de un coche, sólo con un simple adaptador y un transformador de MaxPlay.

Por poco más de 20 euros tenemos la posibilidad de conectar la Wii U dentro de un coche y mantener a los acompañantes entretenidos durante largos trayectos, siempre y cuando el juego permita Off-TV. Por el momento son muy pocos, como Nintendo Land, LEGO City Undercover o Zombi U, los que requieren de las dos pantallas, pero este método es mucho más económico que un buen ordenador portátil dedicado a juegos, para tener en cualquier lado juegos como CoD: Black Ops II, Tekken Tag 2, Assassin's Creed III, Ninja Gaiden 3, New Super Mario Bros. U, Monster Hunter 3 Ultimate o Need for Speed: Most Wanted U, incluso permitiendo jugar a dobles si quien sujeta el mando con pantalla se porta bien con el 2P. El problema es que esa lista de juegos está lejos de crecer.

Seguramente los habitantes de las casas más grandes agradecerían, antes que poder jugar en cualquier parte del mundo, poder jugar en cualquier parte de su propia casa gracias a algún tipo de repetidor de la señal que permitiese algo más de esos supuestos diez metros que se acortan cuantas más paredes hay por el medio.

¿Cuál sería el siguiente paso para convertir Wii U al terreno portátil? Obviamente, una batería recargable que permitiese a la consola ser perfectamente autónoma, como si de un ordenador portátil se tratase. Hablábamos antes que el tamaño o el peso ya casi no son problema teniendo en cuenta todo lo que alguien se carga al hombro hoy en día. Con una batería conectada a una Wii U que reposase en tu mochila, sólo habría que sacar el Wii U GamePad y ponerse a jugar. Pero para eso ya están las consolas portátiles de verdad, con una 3DS que no intenta acercarse al mercado de los juegos de sobremesa, o con una PlayStation Vita que lo intenta pero que aún así sigue su propio camino. ¿Está el futuro en poder jugar en cualquier parte lo que por norma general jugamos en casa?