El dilema de Half Life 3
¿Sabéis que este noviembre se cumplen diez años desde que salió Half Life 2? Han pasado, además, casi siete años desde la última vez que vimos a Gordon y Alyx en Episodio 2, y hace pocos días surgió una imagen del Source 2 renderizando un mapa de Left 4 Dead 2 además de una imagen que citaba un tal “hl3” entre los documentos de Valve.
HALF LIFE 3 CONFIRMADO.
Vale, respiremos profundamente porque quiero hablar precisamente de eso. Soy un gran fan de la saga y su segunda parte se cuenta entre mis juegos favoritos, pero pensándolo en frío ya no sé realmente por qué lo esperamos con tantas ganas.
Me explicaré: sí, todos queremos saber qué pasa en el Borealis y qué o quién es el G-Man y que será de la guerra y tal, pero han pasado casi siete años. No se puede mantener el interés durante tanto tiempo ¿verdad? Al principio la intriga nos tenía en caliente, pero conforme han pasado los años me he enfriado y casi parece que estoy esperando por costumbre: llevo tanto tiempo haciéndolo que casi es más rentable seguir un poco más porque cada día estamos más cerca de que salga (porque va a salir ¿no?).
En todos estos años el mundo ha cambiado. Los videojuegos han cambiado. Han salido muchos grandes títulos como Braid, Fallout 3, Mirror’s Edge, Flower, Uncharted 2, Red Dead Redemption, Catherine, The Last Story, Far Cry 3… Hemos tenido historias y experiencias de sobra para disfrutar y juegos innovadores que han llenado el vacío que ha dejado Half Life. Hasta Valve ha contribuido a este proceso con Portal 2 o Left 4 Dead. Estamos esperando una secuela y ha habido tantas historias nuevas e interesantes que al final tendría sentido que mirásemos a otra parte.
Pero estoy dejando de lado lo más importante y uno de los principales motivos por los que es uno de los títulos más esperados: Half Life es una saga revolucionaria. La primera entrega cambió para siempre la forma de concebir el shooter en primera persona y la segunda expandió el concepto añadiendo detalles como la simulación física, mientras que los episodios ofrecían pequeños cambios como la experimentación con la IA de compañía en la primera parte o los escenarios abiertos de la segunda. Sin embargo, ahora estamos esperando a una secuela propiamente dicha. Es lo que todos queremos: no un Episodio 3 sino un Half Life 3. Es una tremenda presión porque no sólo tiene que dar respuesta a todas nuestras preguntas. No esperamos un gran juego o una obra maestra: estamos esperando una nueva revolución. Que llegue y cambie nuestra forma de ver el género y de un paso adelante en el diseño o la narrativa. Y he ahí mi inquietud ¿puede ser?
¿Cuando salga Half Life 3 será visto como el nuevo Ciudadano Kane de los videojuegos, igual que The Last of Us? ¿Nos hará replantearnos el significado de “juego”, como Dear Esther o Proteus? ¿Cambiará la forma de construir una narrativa en los videojuegos, como Dark Souls? ¿Será la IA de Alyx contemplada como la de Elisabeth?
“No seas hipócrita”, diréis. “Cuando salga Half Life 3 (te) correrás a por una copia y también lo hará todo el mundo”. Desde luego que sí, porque sigue siendo una continuación a uno de mis juegos favoritos y uno de los mejores videojuegos de todos los tiempos. Este artículo no es tanto debatir la calidad de la futura tercera entrega como debatir si realmente deberíamos tener tantas expectativas. Cuando lo pienso en frío, veo difícil que Half Life 3 marque una revolución del calibre de sus anteriores entregas. Me alegraré el día que Valve decida anunciarlo dentro de muchos años, cuando yazca en mi lecho de muerte, pero creo que debería dejar de pensar en ello como la segunda llegada de Jesucristo.
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