El desastroso catálogo inicial de Xbox 360
Sin saber qué deparará a la historia de Xbox One y si el rendimiento del catálogo inicial acaba funcionando como esperan desde las oficinas de Redmond, resulta paradójico lo que aconteció al comienzo de la presente generación para Microsoft, con un catálogo de juegos y futuras franquicias que acabaron fracasando estrepitosamente a pesar de ser esperados por el gran público. Retroceder a principios de diciembre de 2005 y ver la recepción de esos inicios es un ejercicio, como mínimo, interesante.
Los dos grandes nombres de la nueva y flamante 360 fueron dos obras de Rare: Kameo y el retorno de Joanna Dark en Perfect Dark Zero. Dos flamantes producciones que respondían ante el usuario más exigente, que esperaba jugar con sendos juegos del estudio británico muy esperados y ansiados. ¿Resultado final? Dos fraudes. Con sus cosas buenas, evidentemente, pero suficientemente desastrosos para no haber vuelto a saber de ellos desde entonces. Puede parecer injusto con las incuestionables virtudes del juego de aventuras o con el multijugador ejemplar de Zero, pero más allá de una re-edición del original de Nintendo 64 y unos diseños para secuela de Kameo, la realidad es que a nadie ha importado la muerte de esos dos obras.
La apuesta multiplataforma pasaba por un FIFA 2006 Rumbo al Mundial que sonrojó a toda la comunidad futbolera en plena debacle de EA Sports en los desarrollos de fútbol virtual y Call of Duty 2, que se erigía, sin duda, como el must have del comienzo generacional de Microsoft. Hasta la llegada de obras como Oblivion, Dead Rising o Gears of War un 16 de noviembre de 2006, los usuarios de 360 pasaron un hambre infinita, que venidos del cierre abrupto de la producción de juegos en la Xbox original provocó algún que otro enfado importante.
Quedándonos con los nombres de Kameo, Perfect Dark Zero y Gears of War como carta a la esperanza de la plataforma, podríamos encontrar un paralelismo que asusta con los nuevos Ryse, Dead Rising 3, Killer Instinct y Titanfall en el rol del juego de Epic. En el campo del deporte y los tiros ganamos de goleada, y nunca mejor dicho: FIFA 14 con una EA excelsa en ese campo y dos pesos pesados como Battlefield 4 y Call of Duty Ghosts, que aunque vaya a salir a 720p es una garantía de juego en línea como prácticamente ningún juego de estreno en One.
El tiempo dictará un juicio, pero los tiempos han cambiado mucho para la firma de Microsoft, y más allá de ese sencillo paralelismo entre un estreno acontecido y el que vendrá, los primeros pasos de la next-gen americana resultarán apasionantes. Estoy ansioso por ver qué nos deparará para entonces, pero pase lo que pase, dudo que vayamos a pasar tanta hambre como la que pasamos los early-adopters de 360.
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