Un grupo de usuarios ha publicado los secretos de The Binding of Isaac: Rebirth, lo que ha supuesto que Edmund McMullen, creador del juego, se enfade con el usuario, el público y el mundo en general, ya que esperaba que los jugadores tardaran meses en descubrirlos por su cuenta. Tal y como declaró en una entrevista:
Es desalentador. Es una mierda porque empezaremos a trabajar pronto en una expansión, y seguro que no nos va a llevar el maldito mismo tiempo que nos llevó crear Rebirht. Especialmente en el caso de Simon, que hizo todo lo posible por esconder las cosas y evitar que la gente hiciera lo que está haciendo; pero como lo ven como un desafío van a seguir haciéndolo de todas formas"
Aún calentito con el mosqueo, McMullen auguró que no incluirían nuevos secretos en la próxima actualización, ya que, total, 'no le importan a nadie'. Una actitud infantil y muy poco profesional que parece olvidar que la gran cantidad de usuarios que han descargado -incomprensiblemente- su juego, no han accedido a estos secretos y siguen buscándolos por su cuenta.