El acuerdo de GAME ante el cierre de Gamestop

El lunes 15 de septiembre, a las 10:30 de la mañana, los trabajadores de los diversos puntos de venta del gigante Gamestop Iberia S.L. recibían un e-mail en el que se les notificaba el inminente despido colectivo de todos los empleados de la compañía para finales del mencionado mes. Patada en los huevos mediante, y como no hay mejor forma de empezar la semana, pronto los twitters, foros y teléfonos de redacción de la prensa -especializada o no- se llenaron de información acerca de este abandono total del territorio español de la que había sido, para muchos, su tienda de videojuegos.

 

Ante el cabreo monumental de trabajadores y clientes que tenían pendientes serivcios con la compañía, Gamespot ha decidido hacer un comunicado oficial en el que explica los motivos del cierre, asegura la continuación de algunos servicios gracias a un acuerdo con GAME y confirma de forma oficial el cierre: El uno de octubre el letrero de Gamespot desparecerá de 103 tiendas -más de 120 según decía la página web de la compañía-, que cerrarán sus puertas o cambiarán de dirección. 

 

Mariquita el último

El comunicado oficial -que por cierto, está en inglés, supongo que para tocar un poquito más las narices por ver cómo suenan-, habla de una decisión meditada que no se ha tomado a la ligera y a la que se han visto obligados al no conseguir la rentabilidad esperada en los nueve años que llevan operando -cuan banda armada- en el país. Palabras bonitas, justas y sabias que no justifican la sorpresita de vuelta al cole con la que han decido honrar a los trabajadores que llevan casi una década acosando a los incautos con reservas y suscripciones en nombre de la compañía.

 

Y es que a lo mejor soy un ingenuo, pero chacho, si todo apuntaba al cierre y la cosa no estaba para aguantar podríais haber tenido una palabras con los trabajadores y haberles explicado la situación mientras llegábais al acuerdo con GAME. Por supuesto eso habría supuesto perder algunas reservas y dejar de hacer dinero unas semanas, pero habría sido mucho más honrado que ese dejarlo todo 'atado y bien atado', mandar un mail con multicopia oculta a todos los currantes y luego salir pitando gritando el viejo adagio del 'maricón el último' que menciono, no por homofobia, sino en virtud de la más pura tradición de los parques infantiles.

 

 

¿Estamos de acuerdo?

Es posible que Gamespot argumente a su favor que querían esperar a que el acuerdo estuviera firmado antes de que el público se dejara llevar por la histeria. También es posible que intentaran hacer como Opening, limitándose a desaparecer, y la cosa les saliera rana. Sea como sea, se escudan en un papelajo firmado en el que se asegura que GAME se encargará de tomar el relevo de las tarjetas regalo, los puntos y las reservas, así como de la adquisición de algunas -vaya usted a saber cuantas- de las viejas tiendas de la competencia. Y como guinda, más bien cereza amarga, nos regalan una frase de esas que en mi opinión pide a gritos la reinstauración del cepo y la picota en las plazas públicas: 'Estamos enfocados en mantener los compromisos adquiridos con clientes, empleados, vendedores y accionistas durante el proceso'.  

 

Lo único bueno de la situación es que la compañía seguirá existiendo en otros puntos de Europa, lo que hace que haya alguien a quien reclamar en caso de problemas. 'De mientras', nos vamos a encontrar con un nuevo incremento en las cifras del paro y un buen puñado de trabajadores especializados que vuelven a su casa por donde vinieron. Desde aquí un abrazo a todos, no de vicio, sino de ánimo.

 

Y ese es el problema: Los trabajadores.

El problema porque muchos se irán a casa, y el problema porque una parte oscura de mí quiere enarbolar la bandera del 'que les den a las compañías' del 'saltémonos al intermediario' y del 'dejemos de pagar cuarenta pavos por un juego que tiene dos años y movámonos un poquito por internet', pero eso sería cargarnos a una empresa que, abuse más o menos, da muchos puestos de trabajo. 

Está puñetero el tema...

¿Debería primar el bien común del jugador sobre el del empleado con un trabajo? En ese caso habría que decir que, efectivamente, lo de GAME es una chufa. No hay más que navegar cinco minutos por cualquier navegador para encontrar juegos más baratos y de primera mano. Basta con pasarse por un par de foros para ver que el intercambio entre usuarios sin pagar un chavo al intermediario es posible. Y basta con poner un anuncio en cambalache para ver que, aunque las tiendas te digan que tu juegos con tres meses de uso no vale más de diez euros, muchos usuarios estarán dispuestos a pagar veinte por él. 

 

 

Se ha creado una necesidad

Una necesidad tan humana como el comprar la carne en el mercado o pillar el tabaco en el estanco: la necesidad del cara a cara, de la comodidad del aquí y ahora, y es una pena porque es una 'necesidad' que, en realidad, no es necesaria. La única justificación para no plantarnos, para no decir 'se acabó', es la de mantener unos puestos de trabajo que a día de hoy son tan necesarios como el agua en verano. Pero... ¿De qué vale preocuparnos por los trabajadores si en cuanto la empresa no logra los objetivos se va a otro sitio y deja a sus empleados vendidos?

 

El mundo está cambiando. Tiene que cambiar. Por ahí leí -tal vez lo viera en algún canal 'para gente lista' antes de que se lo pulieran- que dentro de veinte años más de la mitad de las profesiones existentes serán totalmente nuevas. Ya hay espabilados que montan empresas .com de servicios innecesarios que se ofertan como agua de mayo: representación para indies, managing para webmasters, consulting para grafistas... Cada vez hay más y más intermediarios en un momento en el que internet se muestra como la herramienta perfecta para el contacto directo, y mientras el autor que se autopublica monta pronto una empresa para enseñar a autopublicarse, el que no destaca quiere enseñar a destacar y los abogados tratan de meterse en medio como puedan, aunque eso último no es nuevo. 

 

¿Entre nosotros? Sigo sin decidirme entre abrir la veda del tiro al buitre o llamar a la calma y al dejar las cosas como están. Eso sí, personalmente, tengo claro que voy a pulirme los puntos que aún puedan quedarme en mi tienda de videojuegos y voy a rendirme a internet. Vosotros haced lo que queráis. 

 

¡Nos leemos!

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