E3 2017 - Detroit: Become Human y el reencuentro con David Cage
Fui de los que se perdió el bombazo de Fahrenheit y, quizás por eso, Heavy Rain me pegó tan fuerte, pero mi experiencia con David Cage es una montaña rusa. De buscar a Shaun y al asesino del origami como un loco pasé a buscar un motivo para no apagar la consola ante el sopor telequinético de Jodie, lo que me llevó a tirar de archivo. Descubrí Fahrenheit y Omikron: The Nomad Soul, el golpe sobre la mesa y la ópera prima de Cage respectivamente, dos juegos irregulares pero con elementos fundamentales para construir lo que vino después. Si algo tengo claro hoy, es que estoy perdido ante su siguiente paso.
El autor más cinematográfico de la industria del videojuego viene de la obra más irregular, predecible y automática de su historial, y lo hace presentando el abanico de posibilidades más amplio de su carrera. Detroit: Become Human acoge más desenlaces que nunca, incluyendo la muerte de todos sus protagonistas, y lo hace con un trasfondo genial para que las dobles lecturas y el mensaje de autor queden impregnados en él. ¿Puede ser esta la redención de David Cage?
Es casi irónico que el juego lleve en el nombre la ciudad que iba a ser la cuna del futuro y hoy parece condenada al ostracismo tecnológico, pero también podría ser intencionado. Quantic Dream viene de un título flojo y las miradas ahora están puestas en juegos como Life is Strange; un juego menos centrado en las mil posibilidades pero más acertado en contar algo que interesa. No es tan descabellado pensar que esta sea la última bala en el cargador de un estudio que hizo más cine que videojuego la última vez, pero que también ha demostrado que sabe hacer cosas distintas y atractivas.
Esta ocasión tenemos a androides cansados de ser máquinas obedientes y a otros que intentan que todo siga igual. Dos visiones de una misma realidad; en nuestras manos queda enviar un mensaje de paz o una declaración de guerra. Querer ver o no paralelismos directos entre el juego y una realidad política en plena ebullición ya es cosa de cada uno, pero en mi opinión son bastante evidentes. Detroit: Become Human, el juego con más posibilidades de Quantic Dream, parece que también va a querer atreverse a que el jugador se haga ciertas preguntas. Que las mismas merezcan ser respondidas es algo que habrá que ver, pero por hoy le concedo algo más que el beneficio de la duda.
<< Anterior Siguiente >>