[E3 2013] El PC, a la sombra de un gran evento

Sony por aquí, Microsoft por allá, Nintendo liándola... Todo esto está muy bien y demás, pero ¿no os da la sensación de que siempre hay alguien que se queda fuera de la fiesta? Y con esto, por supuesto, me refiero al PC, entorno que a día de hoy cuenta con un más que importantísimo núcleo de usuarios y que en la actualidad se encuentra en plena forma.

Cabe decir que la ausencia de protagonismo por parte del catálogo PC tiene su lógica en un evento donde priman ante todo los valores económicos, y la evidente prioridad no es otra que la de mover unos sistemas de los cuales se adivina que reportarán a la industria millones y millones de euros. En este sentido, Sony y Microsoft convulsionan el sector con su venidero hardware, otorgando renovada vida al mundo del videojuego e insuflando nuevos y positivos números que contrastan sobremanera con los más humildes valores relativos a los juegos de ordenador.

Sin embargo, en el universo PC se vive de otra manera. Baste contemplar que el más importante núcleo de cara a adquirir software para Windows y demás se encuentra en una Steam cuya responsable, Valve, ha brillado por su ausencia en este E3. Y es que a la más popular de las tiendas digitales ni le va ni le viene hacer acto de presencia en tan ruidoso escenario, teniendo muy claro que el marco que poseen desde su conglomerado en línea ya les hace todo el trabajo publicitario, amén de que los desarrolladores sitos en los ordenadores personales se encuentran muy a gusto en Steam, amoldándose de paso a unas propiedades más exiguas en lo que a inversión se refiere.

Por otro lado, y a pesar de que gran parte de los títulos multiplataforma están también anunciados para Windows, hay otros tantos que inoportunamente no parecen tener cabida todavía en los planes de determinadas empresas. Un caso que me ha llamado especialmente la atención es el relativo a Tom Clancy's The Division, presentado únicamente para Xbox One y PlayStation 4. Según han declarado desde Ubisoft, el motivo por el que aún no se ha contemplado el PC como plataforma para este bombazo es porque quieren centrarse a tope en el potencial de las consolas de nueva generación. Algo que puede parecer extraño si tenemos en cuenta hasta dónde pueden llegar las últimas tarjetas gráficas DirectX11.

Luego está Metal Gear Solid V. Que sí, que saldrá en compatibles PC, pero desde luego, y a tenor de las palabras del amigo Kojima, esta versión ahora mismo no es ninguna prioridad, no hay, como aquel que dice, fecha de salida (que tampoco es que la tengan el resto de versiones). Pero claro, uno, como usuario de una torre armada con una buena tarjeta gráfica capaz de rivalizar con las maquinitas next-gen sufre de ira ante la indiferencia que suscita el PC como sistema de videojuegos.

Claro que todo tiene una explicación. Dejando de lado el negocio que supone apoyar a las videoconsolas (porque esto es así), convertir un juego a PC no es moco de pavo. No estamos hablando de un sistema cerrado, sino de tropecientas combinaciones en lo que a CPU, placas base, tarjetas gráficas y tipos de memoria se refiere. Parece una tontería, pero de cara al desarrollo es una inversión de tiempo bestial el probar grosso modo el mayor número de combinaciones posibles. Y estas generarán un buen puñado de bugs que habrá que depurar, y que posiblemente generen a su vez otros bugs de cara a otra combinación distinta.

Dicho esto, se puede explicar el por qué puede llegar a costar ver ciertos desarrollos en PC. Por supuesto que lo que mencioné antes -el factor negocio- y la piratería que consume al mercado Windows son matices importantísimos, sobre todo este último, muy capaz de dejar ridículos beneficios (algo contra lo que lucha Steam contra viento y marea); pero a nivel de desarrollo queda dicho que las casas se encuentran día sí y día también ante todo un desafío.