Driveclub, apostará por lo social y el espectáculo gráfico

Interesantes declaraciones de uno de los directores artísticos de Driveclub: el juego apunta hacia el espectáculo pirotécnico y la interacción social pero nos preguntamos donde quedará la conducción. ¿Podrá ser rival para The Crew?

Sabemos que Driveclub no va a jugar en la liga ni de Forza Motorsport 5 ni de Gran Turismo 6 y no por ello hemos dejado de prestar atención al título exclusivo de PlayStation 4. Pero se puede leer entre líneas que las intenciones del equipo responsable del título apuntan hacia otra dirección. «Hay detalles propios de un shooter», ha explicado Alex Perkins a The Guardian. «Ya no tenemos que falsear las luces o las sombras, hemos añadido efectos para hacer que, al mirar hacia el sol, parezca más cercano a la realidad».

Siendo un juego de salida, Sony necesita apostar por el músculo y demostrar que PS4 guarda en su interior varios ases bajo la manga, y Driveclub podría señalar en esa dirección y unir lo social a su apuesta.

Paul Rustchynsky, director del juego, lo ha dejado claro: «El juego tiene mucha profundidad y si quieres recortar milésimas de segundo de una vuelta, podrás hacerlo». Recordamos que el título está pensado como una experiencia totalmente online en la que los jugadores formarán equipos que se medirán entre ellos por ver quién es el más rápido.

¿Dónde queda la conducción en todo esto? Rustchynsky no quiere que salten las alarmas: «Estamos a medio camino entre el simulador y el arcade. Pero los coches tendrán un comportamiento cercano a la realidad, notarás su peso al conducirlos y notar la adherencia sobre el asfalto, pero también queremos que sea fácil atacar una curva de manera muy directa». Las palabras suenan a intento de contentar a todos los públicos pero... ¿lo consiguen? «Queremos que sea fácil coger el mando, pisar el acelerador y correr», concluye.

Descartada la lucha contra Forza Motorsport, Driveclub va a competir en la misma liga que The Crew o que Need for Speed Rivals. Y en esa liga parece haber un componente crucial: el social. ¿Será la nueva cara del videojuego de conducción de corte desenfadado? ¿Obligará a Electronic Arts ha reformular su saga estrella? ¿Será DriveClub, a falta de un Gran Turismo, un caramelo lo suficientemente goloso para los amantes de la velocidad?