1. Mundogamers
  2. Noticias

Donkey Kong y su record, superado otra vez

Y eso que el juego va de llegar al final
Por Adrián Suárez Mouriño

Un videojuego es mucho más que lo que ofrece a simple vista. Tú puedes cogerlo, meterlo en tu consola y seguir su propuesta: su modo historia o la competición que ofrezca; pero ahí hay mucho más. Algo que nos demuestran la cantidad de noticias referentes  a cómo un tipo se cargó a dos de los bosses más difíciles del primer Dark Souls a golpe de guitarra de Guitar Hero, cómo otro chaval se pasó no-sé-cuántos meses para eliminar a todo bicho viviente de Fallout 3 o el récord que se supera, una y otra vez, de Donkey Kong.

 

El videojuego, sus mecánicas, permiten muchas más capas de reto de las que se ven a simple vista, a causa de una combinación de aventura guiada por la narrativa y otra conducida por el fervor arcade (puntos, puntos puntos). Uno de los primeros en contar con esta cualidad fue el propio Donkey Kong. El título empujaba al jugador, no a hacer puntos, sino a rescatara a Pauline; aún así, ese contador que descendía a medida que nos demorábamos, sumado a los puntos que hacíamos al saltar esquivando barriles o derrotando enemigos con el martillo, hablaban de que se podía hacer algo más que lo que la trama original del juego pedía que hiciéramos.

 

 

Este cruce de caminos evolucionó en las conocidas como misiones secundarias, que también, apoyándose en pilares narrativos, nos hablaban de todo lo que había a expensas de la aventura principal. Pero el jugador es siempre capaz de mirar un poco más allá, de encontrar nuevas maneras de desafiarse a sí mismo, más allá de lo que el propio título pide; y también la industria es capaz de recoger eso y seguir premiando al usuario por hacerlo. Y entonces llegaron a nosotros los logros, que no son otra cosa que hacer el más difícil todavía; o mejor dicho: el más raro.

 

Los nuevos premios que se otorgan a los videojuegos llegan a través de lo que los jugadores ya han probado; de hecho, las revisiones de los clásicos cuentan con logros para agasajar como los tiempos mandan a quines exprimen el juego como antaño. No dudéis que los próximos logros o maneras de mimar al jugador por hacer cosas irán por, sí, derrotar a Ornstein con una guitarra de Guitar Hero, descubrir los bugs de un juego o arrasar con todos los habitantes del mundo a base de machacarlos con una cuchara, superando las barreras o la necesidad de la inmersión que ha de tener de un título y yendo más allá; como ya hacen algunos con demasiado tiempo libre por ahí.


<< Anterior Siguiente >>