1. Mundogamers
  2. Noticias
  3. PS4

Deus Ex Mankind Divided y las charlas con los bosses

Ser sigiloso, elocuente o ir a leches por la vida
Por Adrián Suárez Mouriño

El nuevo Deus Ex parece muy centrado en corregir todos los fallos de su anterior entrega y hacer con ello algo muy interesante: romper o fragmentar todo lo posible, dentro de sus reglas de juego, la estricta libertad dirigida que atenaza y permite a la vez jugar al jugador.

 

Ser sigiloso, ser una bestia parda de destrucción o emplear el diálogo, esas son las opciones que tenemos para sortear los distintos capítulos del juego. Lo interesante, de todos modos, no es ser unos puristas en la manera de superar los peligros. Muchas veces iniciamos un videojuego pensando pues este título yo me lo paso sin soltar una bala. Esos pensamientos son válidos en una segunda vuelta, pero en la primera partida el título tendría que ser capaz de cabrearnos, de sacarnos de nuestras casillas y hacernos matar aunque lo que queramos hacer es dialogar. Por supuesto, también debería poder hacer todo lo contrario, con una humanidad dividida pidiéndonos sangre y nosotros decidiendo dialogar.

 

Aquí es donde se puede disfrutar de una libertad que, aunque siga siendo falsa, vendría bien trampeada por las distintas opciones de acciones. Es durillo jugar un videojuego de rol, con una estructura de juego que se esfuerza en que decidamos, sintamos cosas, suframos y disfrutemos como queramos y en muchos tramos no podamos más que seguir el cursor que hay en un mapa a la esquina, sin opciones o, como dije arriba, pudiendo planear toda nuestra cadena de acciones y tan solo limitarnos a ejecutarla, por la recompensa pero sin incertidumbre.

 

 

Que exista la posibilidad no quiere decir que se vaya a hacer bien, todo dependerá de lo flexible que sea el videojuego para mostrarle y dejarle tomar estos tres caminos al jugador, de cómo lo premie al tomar uno u otro y de lo interesante que sea jugarlos. Si se conviertan en tres pasillos entre los que hay que elegir uno al iniciar cada tramo, malo. ¿Se podrá dar un puñetazo, comprender que somos inferiores en fuerza, escondernos empleando el sigilo y rendirnos o intentar negociar luego hablando? ¿Se tratará más bien de escoger entre tres vías y tomar una hasta sus últimas consecuencias y sin vuelta de hoja?

 

Estas decisiones no solo tienen que decidir lo rigurosas que son a la hora de iniciar una cadena de acciones, también a la hora de hacer evolucionar el jugador. Si empezamos la partida siendo sigiloso y se favorece que sigas un mismo camino, gastando puntos de habilidad en él para poder ir, baldosa a baldosa, hasta llegar a la habilidad definitiva de esa manera de jugar, no cogeremos habilidades de guerra o charla, y no las usaremos.

 

Veremos cómo solucionan estas cuestiones en el futuro y prometeder Deus Ex Mankind Divided. Hay muchas ganas de catarlo, porque pese a las dudillas lo que hay de verdad es mucha fe, sobretodo tras jugar al anterior.


<< Anterior Siguiente >>