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Destiny 2 muestra sus cartas en su presentación, y nos gustan

Mucha exploración, mejor PVP, clanes...
Por Adrián Suárez Mouriño

Destiny 2 ya es más que oficial y tiene pintaza; Destiny 2 es mucho más grande en ambición y escala, llegando a PC, preparado para dar cariño tanto para el jugador que juega solo como para el que lo hace acompañado y con un potente sabor a reinicio. Lo comentaron en la presentación, y en las propias escenas cinemáticas introductorias se dio muestra de ella. Equipos más pequeños para las raids, un PVP reformado, mucha exploración y mucho por hacer. La verdad es que por la presentación que acabamos de ver daba la sensación de que el Destiny original, con todo en lo que se acabó convirtiendo, no ha sido más que un borrador de lo que está por llegar; ahora veremos si esto se cumple, claro.

 

Técnicamente, Destiny 2 impresiona, y lo hace tanto por belleza pura como por el diseño de sus batallas, aunque no sea un salto excesivamente pronunciado con respecto al original salvo en rendimiento, luz y empleo de partículas, pero con todo, Destiy 2 es muy resultón. El empleo combinado de poderes, tanto tuyo como de tus compañeros, la aparición de los puntos de daño, la eliminación de objetivos de manera conjunta y el avance por las fases, consiguen mostrar la mejor cara de la combinación de RPG, aventura y shooters del original. Como buena segunda parte, los villanos tienen las de ganar, y eso cubre de épica las batallas. Curiosamente, los colores naranjas en entornos oscuros que se vieron en el gameplay de la presentación recordaban mucho a El Imperio Contraataca, también la aparición de muchos enemigos con armas de filo en combinación con las de fuego, lo que da al juego un maravilloso ritmo que te hace estar pendiente de las cortas y las largas distancias.

 

 

Lo cierto es que el gameplay mostró mucha coherencia e intenciones positivas: un buen empleo de las habilidades, scripts y coreografías muy agradecidas, un interesante manejo de los escenarios y un buen reparto de los enemigos a los que nos hacen enfrentarnos; y como en esta ocasión nosotros estamos perdiendo, todo tiene un tono de desesperación que es fantástico para la narración de las batallas. En la presentación se ha hablado de una campaña cinemática, lo que nos asegura muchos vídeos y una aventura principal que esperemos sea más intensa que la del título original, pero que a la vez sepa ser flexible y no caiga en los errores de Call of Duty. Lo posible es que la libertad la encontremos en las clases, pero reformadas, con más poderes, habilidades y personalización, así como en las armas, puesto que la campaña tiene pinta de ser bastante rígida en este aspecto; lo de que va a haber cinemáticas por un tubo lo han repetido bastante, la verdad.

 

¿Qué ocurre cuando los superhéroes pierden sus poderes, su luz? Este es el punto de partida para la nueva historia que nos quiere contar Destiny 2, que nos llevará a salir al exterior y recuperarla por lugares que, por fortuna se han reformado mucho con respecto a la primera entrega. Pero no todo será la campaña, también se acentuará a la exploración y las cosas que hacer en los mundos, sin tener que volver a orbitar tan a menudo esta vez, lo que le dará un ritmo que el juego necesitaba.

 

 

Cada vez que lleguemos a un nuevo mundo tendremos que tener en cuenta los puntos de aterrizaje, pues podremos encontrar lugares secretos que explorar (hola, cueva del loot) y tareas que aparecerán en un nuevo mapa preparado para la ocasión, y esto incluye también misiones en cooperativo que estarán disponibles en determinados planetas y zonas, que por cierto, llegan cuatro nuevos, lo que demuestra lo grande que será Destiny 2 con respecto al primero, y las cosas que podremos hacer sin tener que volver a montarnos en nuestra nave. El contraste entre una campaña cinemática y un modo para explorar de manera cómoda escenarios grandes es prometedor, y para hacer esto más cómodo, llegan los clanes. Bien. También ayudas para que el jugador solitario pueda unirse cómodamente a uno y guías para orientarlo al cooperativo. Lo cierto es que ha insistido mucho en que el jugador al que le gusta jugar solo tendrá su sitio en Destiny 2, tanto explorando como combatiendo como en la campaña, y se agradece.

 

Destiny 2 es Destiny pero con mucho más contenido, mejorado, con exploración y creyéndose más su propia propuesta. Los planetas nuevos tienen una pinta fantástica, también todo lo que parece que podremos hacer en ellos, y aunque en lo jugable todo parezca estar igual pero más ordenado y medido, es justo lo que le hacía falta a esta franquicia: modos, contenido y extensión, porque a los mandos el título ya es fantástico. Ojalá todo esto sea cierto y cuando llegue el juego a nuestras manos tengamos un título grande, lleno de contenido y preparado para recorrer parajes nuevos con nuestros amigos en busca de territorios desconocidos. El 8 de septiembre llegará a nuestras vidas.

 

Por cierto, este verano tendremos beta, habrá que estar atentos a su fecha, y para jugar en Destiny 2 en PC habrá que hacerlo a través de Battle.net


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