1. Mundogamers
  2. Noticias

Dejar atrás las rupturas entre generación ¿quizá es una buena idea?

Damage control
Por Bruno Louviers

Llevo ya tres días escribiendo en un tono lo menos odioso que puedo sobre lo positivo que pudiera ser el lanzamiento de PS4 Neo y, con ella, el inicio de una nueva forma de entender las generaciones de consolas. O mejor dicho, una forma de acabar con ellas, que es lo que podría estar intentando Sony con su 'nueva' consola y a lo que podría sumarse Microsoft si todo lo que han dicho de Scorpio, las 4K, la compatibilidad con Xbox One y su relación con el PC termina siendo cierto.

 

Quiero que entendáis que me parece horrible y un poco tomadura de pelo que PS4 vaya a ser 'sustituida' por otra cosa dentro de poco. La consola, que a mí me ha hecho pensar en Sony como en la compañía que nos dio PS2 y un reproductor de DVD a la vez; se merecía más tiempo de respeto, pero pronto empezaremos a verla como un cacharro desactualizado y que funciona peor que PS4 Neo, que será más potente y, si los rumores son ciertos, correrá los mismos juegos, solo que mejor. 

 

El futuro obsesivo de las consolas hecho imagen de colores

 

No habrá una ruptura, por tanto, entre PS4 y PS4 Neo. De nuevo, todo esto si Sony no miente. Y por ello, yo no puedo dejar de pensar en el avance que supusieron las cuatro primeras generaciones de iPhone y cómo fuimos entendiendo que un mismo 'teléfono' podía ser varias cosas a la vez gracias a una plataforma unificada de aplicaciones que obedecía a un mismo formato de pantalla pero a distintos chips de potencia. Sí, Infinity Blade iba de pena en el iPhone 3G, pero iba. Y cuando dabas el salto al iPhone 4, pues te resarcías y jugabas a más cosas que no iban en dicho teléfono.

 

¿Estamos en este punto, tan temido por unos (los jugadores y las tiendas) y tan esperado por otros (por los desarrolladores y las compañías)? Pues mira, a riesgo de sonar hater o idiota o desinformado, ojalá. Sí, tarde o temprano habrá que cambiar de hardware, pero hay personas que solo duran un año con un teléfeno y otras que duran hasta tres. Si alargamos esto a cuatro con una consola que puede jugar casi todo lo que se lanza pese a algún tirón ocasional, ¿tan malo sería? 

 

Tirar con el iPhone 6 hasta el lanzamiento del iPhone 8 será posible

 

Por supuesto, los desarrolladores necesitarían ciertas estructuras para no tener que trabajar en más plataformas de las que ya lo hacen. Con esto me refiero: PS4, PS4 Neo, PS5 y PS5 Neo deberían tener unas tripas parecidas para que los juegos funcionaran sin demasiado trabajo extra. Aquí es donde yo resoplo y veo mi propio comentario como algo imposible. Si les cuesta hacer funcionar un juego bien en un ordenador además de en consolas, como ha pasado con tropecientos juegos en esta generación, ¿cómo van a hacer esto bien? 

 

Hay muchas cosas que aún no sé sobre cómo se plantean estas posibles consolas intergeneracionales, pero me parece evidente que el cambio va a llegar y que va a ir por esta dirección, por eliminar las rupturas abruptas entre generaciones y crear espacios de desarrollos que se extiendan durante años y varios dispositivos dentro de una misma familia. 

 

157252project scorpio 3419774

 

Y sobre el papel, esto no tiene por qué ser tan malo. Igual que yo cambio de móvil cada tres años, otro puede hacerlo cada uno si se lo permite y saltar de PS4 a PS4 Neo y PS5 sin remordimientos. Yo me conformaré con jugar el nuevo God of War a menos resolución y con algún tirón de frames, pero sin gastar más dinero en hardware. Y cuando no pueda jugar al siguiente God of War, entonces me conformaré con juegos indies que sí funcionen hasta que tenga dinero para la siguiente consola. 

 

Ahora bien, los jugones tendremos que aprender a lidiar con esto, que yo soy el primero al que le fastidia que se lance una nueva versión de una misma consola porque siento que la mía ya está desactualizada. Quizá este es el quid de la cuestión de cara a PS4 Neo y Scorpio, que somos un grupo de gente poco conformista, que es muy vocal con las compañías que los fastidian, pero que, al final, somos tremendamente fieles a las marcas y los productos. 


<< Anterior Siguiente >>