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Deep Down y sus cofres que muerden

Convirtiendo elementos seguros en monstruos
Por Adrián Suárez Mouriño

Deep Down sigue mostrándose en vídeo. El videojuego firmado por Ono, y firme candidato a convertirse en el título free to play más interesante de la primera etapa de la next-gen, no oculta lo que es: una propuesta a caballo entre Dark Souls y Monster Hunter. Mientras que las batallas con los bosses, su planteamiento y su ritmo son herederos del cazamonstruos, el ambiente y partir de una trama que es un puro misterio que no quiere desvelarse es de From Software, incluso el hecho recoger retazos de información a través de objetos, volviendo con ellos al pasado, es mucho más de Dark Souls que de Assassin Creed.

 

Y digo que lo oculta porque en este último vídeo nos hemos encontrado con uno de los elementos más característicos de éste: un cofre con dientes.

 

 

Lejos de criticar a Capcom por copiar, homenajear o plagiar, al adorable bichejo de From Software, no puedo sino alabarlo. Los cofres que te atacan, en lugar de dejarse abrir, representan la máxima expresión de un aventurero que se adentra en un terreno peligroso. Aunque estos ya se pudieron ver en juegos como Dragon Quest, nunca con el grado de terror que se vió en Dark Souls. Introducirse en una cueva desconocida, debería ser eso: una experiencia totalmente desconocida ¿cómo es posible que conozcamos de antemano donde grabar, lo que es una puerta y que una caja de madera contiene un tesoro? No tiene sentido. Si en la vida real lo hiciéramos, no econtraríamos nada de eso. Parece algo tonto, pero ese punto de realismo tan necesario se consigue alterando esos elementos, no tanto añadiendo nuevos enemigos, monstruos o tramas, sino alterando lo que creemos saber.

 

En juegos como Fallout o Skyrim resulta ridículo que todo se repita mazmorra a mazmorra: cajas, escaleras... mucho más en el caso de Skyrim y sus posadas clónicas.

 

 

Pero no se pueden quedar sólo en los cofrés. En Deep Down se adivina que también se cambiará la manera de entender las mismas dungeons, mediante los datos recogidos en antiguos objetos pero queda ver qué harán con las armas y todo lo demás ¿Alguien ha dicho micropagos?


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