Dead Star: Juegos de naves y Juegos de naves
Cada vez que Playstation Plus incluye un juego de naves, me pongo de mala leche. Entendedme, no es que tenga nada en contra del género, pero me cansa que se sigan explotando fórmulas a las que llevo jugando desde hace 30 años con 'pequeños añadidos' y 'audacias' que lejos de incrementar el valor de la nueva obra, lo tiran por el suelo llegando incluso a insultar la forma en la que se hacían las cosas hace unas décadas y el esfuerzo de los desarrolladores de antaño.
Por poner un ejemplo ahí tenéis a Shutshimi, un juego que trata de emular a Parodius sin comprender una mierda de lo que eso significa, que intenta crear la parodia mediante chistes tontos y sin gracia y que resume su experiencia de juego a fases de ocho segundos sin chicha ni sustancia en la que todo va cambiando al azar. Tras dedicarle una hora con mucho sufrimiento he descubierto que no sólo no hay nada bueno que decir del juego, sino que me parece ofensivo hacia el estupendo trabajo que se hacía hacce décadas con un planteamiento que a los más lerdos les ha hecho valorarlo como juego del año pero que a poco que lleves en esta afición, es más de vergüencita ajena.
Luego tenemos Dead Star.
Cogí Dead Star sin ganas, me gustó su Entrenamiento y me cabreé con él cuando no pude jugar el primer día porque a algún lumbreras se le ocurrió que ningún momento como el día de su lanzamiento en Playstation Plus para poner a punto lo servidores y tenerlos horas en mantenimiento.
Una vez superado el cabreo, el miércoles pude empezar a jugar a Dead Star, y bueno... Me gustó mucho. La idea original de este artículo era la de despotricar como un energúmeno contra la manía de Sony de 'regalar' juegos de navecitas, pero es que realmente Dead Star lo vale, tiene tantas ideas buenas que no puedo menos que dar las gracias, y la gente que está detrás de su desarrollo, Armature Studios, son unos veteranos que saben muy bien lo que se están haciendo.
Batallas épicas online
Dead Star nos ofrece dos formas de juego: Una de juego libre con inteligencias artificiales y otra online contra jugadores reales. Dentro del online, que es el que realmente interesa, nos encontramos partidas de conquista de 5 contra 5 y 10 contra 10 en las que tendremos que apoderarnos de las bases neutrales que encontraremos en el espacio para poder destruir la base rival a la vez que tratamos de impedir que los rivales hagan lo propio con nuestra base.
Dicho suena sencillo, pero Dead Star incluye varios elementos estrategicos como la posibilidad de mejorar nuestras bases con minerales para mejorar sus defensas y medidas ofensivas, a la vez que permite que pilotemos un buen número de naves que van desde veloces cazas hasta cruceros y destructores estelares. Todas las naves son mejorables, tanto durante el juego como en el hangar, y poco a poco iremos mejorando sus cañones, armas secundarias, misiles, escudos, núcleos, blindaje y demás parámetros.
Una de las cosas que más me ha gustado de Dead Star es que todos los vehículos son útiles. Oh, sí, los destructores molan mucho, pero aprender a manejar un caza superveloz y dedicarte a destruir destructores con tu pequeña nave por la vieja técnica del mareo y el atque rápido no tiene precio. La sensación de batalla que da Dead Star a pesar de su vista isométrica y su jugabilidad, que bebe directamente del clásico Asteroids está muy bien, consiguiendo que nos sintamos parte del tiroteo y ganando muchos puntos con el uso de los auriculares y el micrófono con amigos, montando diversos escuadrones en las batallas de 10v10.
Respecto a la personalización, todavía no sé para qué valen la mitad de los componentes que te dan tras terminar un enfrentamiento, lo que de por sí es buena señal, ya que tiene mil pijaditas con la que personalizar y mejorar nuestro amplio catálogo de naves y a nuestro piloto así como sus colores y decoración. Hay otro modo de juego en el que debemos escoltar a una nave nodriza hasta el confín de la galaxia que, lamentablemente, aún no he podido probar por no estar disponible. pero todo apunta a que Dead Star va a seguir creciendo y a terminar siendo un juego muy a tener en cuenta. ¿Alguien ha dicho e-Sport? No seré yo, aunque desde luego tiene todo lo que hace falta para entretener a jugadores y espectadores.
¡Nos leemos!
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