De Nihilistic a nStigate: algo más que un cambio de nombre
Cuando una veterana desarrolladora de software anuncia cambios tan drásticos en su arquitectura como los que va a hacer Nihilistic Software, es que algo no va bien. Para empezar, la empresa pasará a llamarse nStigate Games, y sus miras se van a centrar hacia los juegos en línea, descargables o enfocados a móviles. Una alteración ciertamente salvaje para una compañía que, después de catorce años funcionando, ha trabajado con franquicias tan importantes como Resistance o Call of Duty.
Para entrar en el contexto de la situación, merece la pena que os hable un poco de lo que era Nihilistic. Os puedo decir que fue fundada en el año 1998, por Steve Tietze, Ray Gresko y Robert Huebner. El primero venía de trabajar en Rogue Entertainment, mientras que Gresko y Huebner habían sido empleados de LucasArts. De hecho, muchos de los trabajadores de Nihilistic habían desarrollado antes juegos para el emporio de George Lucas, de donde se puede reseñar el trabajo realizado para el mítico Jedi Knight.
Dos años les llevó la programación de Vampire: The Masquerade -Redemption, un fantástico RPG para PC y Mac que obtuvo el reconocimiento del público y de la crítica. Sorprendió al personal gracias a su particular enfoque jugable, capaz de proporcionar al usuario una metodología lúdica sencilla sin pro ello dejar de ser un profundísimo juego de rol. Tal fue el éxito de su estreno que Blizzard se fijó en ellos para la producción de StarCraft: Ghost, encargándoles así el desarrollo del spin-off del popularísimo título de estrategia. No obstante, y sin que trascendieran los motivos, Nihilistic dejó de trabajar en el juego a mediados del 2004, pasándole el testigo a una Swingin' Ape Studios que tampoco llegó a culminar el trabajo.
Tras lo que podría haber sido el pelotazo definitivo de esta casa, Nihilistic comenzó a vagar por las grandes productoras rogando trabajo. Electronic Arts confió en ellos el desarrollo de Marvel Nemesis: Rise of the Imperfects, que vendría a ser un juego de lucha para consolas con los superhéroes de la editorial Marvel cuya calidad resultó no estar a la altura de las circunstancias. Sin embargo, y ya en Xbox 360 y PlayStation 3, produjeron Conan, un beat'em up basado en las desventuras del bárbaro de Robert E. Howard y que convenció a propios y extraños por su gran calidad y, todo hay que decirlo, lo crudo de sus escenas gore.
A pesar de todo, sus siguientes trabajos fueron de los que se puede considerar menores, con una Konami que le encargaría la programación de un título descargable como Zombie Apocalypse (un arcade multijugador que no estaba nada mal) y una producción de Sony para Move llamada PlayStation Move Heroes. Esta última colaboración supuso un más que interesante acuerdo con los creadores de PlayStation en base al correcto hacer de Nihilistic y, todo hay que decirlo, sus ajustados honorarios. Es por ello que no tuvieron reparos en endilgarles el muerto de realizar para PlayStation Vita aquel Resistance: Burning Skies que tantas suspicacias levantó en base a su dudosa calidad.
Con la cosa de estar a punto de lanzar un Call of Duty: Black Ops -Desclassified que parece no convencer demasiado (en muchos aspectos parece recoger lo peor de su poco apreciada iteración de Resistance), Nihilistic ha visto claro que necesita cambiar radicalmente la orientación de su empresa. Durante todos estos catorce años han estado sobreviviendo bajo mínimos, alquilando sus servicios en base a realizar trabajos muy poco satisfactorios y con pocas esperanzas de resultar un pelotazo. Las últimas críticas a su obra parecen haber culminado las esperanzas de progresar en su viejo formato, augurando con el nuevo cambio el abrirse las puertas ante un modelo de negocio que parece estar en auge. Que no falte por nuestra parte el desearles buena suerte en su nueva andadura como nStigate Games.
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