Dark Souls II nos armará mejor si pasamos por caja

Dark Souls II ya está a puntito de salir del horno. Para amenizar la espera, Namco Bandai nos ha dado más detalles acerca de la edición coleccionista del juego que, además de la figurita de rigor, traerá unos añadidos que afectan directamente a la columna vertebral del juego y que, sin querer, segmentan esta edición a un determinado público.

 

Al adquirir tanto ésta como la edición Black Armour, en el juego se ubicarán unas armas especiales, cinco con sus respectivos escudos a juego. Según la información facilitada, el conjunto formado por un hacha, una maza, una espada larga, un bastón con su catalizador y una daga, están para facilitar los primeros instantes de nuestro viaje. La pregunta es ¿queremos que sea más fáci?
Allanar el camino en Dark Souls es cargar contra su jugabilidad y contra su esencia. Por supuesto, no dudo que From Software haya tenido la habilidad de nivelarlas para que no sea un paseo entre rosas el arranque del título, con o sin ellas. Además, en Dark Souls más importante que el arma que se esgrime es quien la lleva. La habilidad lo es todo, la clave del juego.

 

 

Una edición coleccionista debería premiar a los fans más acerrimos del juego, entregando contenido para ellos. ¿No habría sido mucho más interesante incluir elementos para satisfacerlos? En lugar de ser equipos que permiten filos más letales o escudos más resistentes al daño, deberían venir con habilidades y condiciones locas. Por ejemplo : "Haces el doble de daño, pero mientras no ataques, pierdes vida" o "Te duplica la vida, pero los enemigos te hacen más daño", etc, todo con el fin de que inicies la aventura tomando riesgos nuevos, con estrategias nuevas.

 

Sin embargo, se ha preferido apostar por facilitar el camino a los menos duchos o a los que entienden el juego como "demasiado difícil". Es una filosofía heredada  de los F2P. Puedes jugar mucho, trabajarte mucho la partida o pagar para agilizar el proceso, pay to win. Una curiosa manera de entender las ediciones coleccionista. Con ésta, realmente pagas más, no por tener más contenido, sino para obtener ventajas en el juego ¿Pero consigue esta estrategia satisfacer a los que realmente están dispuestos a pagar más por Dark Souls II? A mí, personalmente, no me atrae lo más mínimo. Dark Souls es el Chuck Norris de los videojuegos, duro a más no poder. Ya en clave de humor, debería hacerte pagar más sin conseguir nada a cambio, o por presentarte a un enemigo descomunal nada más comenzar la partida. Espera, eso ya lo ha hecho.

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