Cumpliendo sueños gracias a la Realidad Virtual

Hemos discutido y hemos escrito mucho sobre la Realidad Virtual, que pronto se convertirá en un dispositivo más que formará parte de nuestra vida rutinaria. Es cierto que todavía queda descubrir cuál será su futuro, si el de los videojuegos, el del cine o el de cualquier otra vertiente artística, pero todo eso importa bien poco cuando descubrimos lo que uno de estos artilugios ha conseguido provocar en una persona, y que probablemente provocará en muchas otras en el futuro. 

Convertirse en astronauta y viajar al espacio es un sueño para muchas personas. Vivir esa experiencia es increíble pero obviamente está al alcance de muy pocos. ¿Qué experimentaríais si, de repente, la Realidad Virtual os permitiera vivir vuestro sueño? Esto es lo que ha conseguido esta persona, que gracias a su hijo y a Oculus Rift ha podido cumplir un sueño que tenía desde pequeño. Las lágrimas brotan mientras vive la experiencia, pero es mejor que lo veáis por vosotros mismos.

¿Bonito, verdad? Un sueño desde pequeño cumplido gracias a un dispositivo tecnológico de uso sencillo. Esta experiencia trata de emular la misión del Apollo 11, desarrollada por una nueva empresa que trata de educar utilizando este nuevo medio. Como digo, es difícil entenderlo desde fuera, pero cuando te pones esas gafas la capacidad de inmersión es tal que verdaderamente crees estar ahí dentro. 

¿Cuándo ha sido tan fácil cumplir un sueño?

Esta bonita experiencia me ha hecho reflexionar y entender que la Realidad Virtual es algo necesario, que también va a saber aportar sus cosas buenas. No creo que cambie nuestra manera de jugar a los videojuegos, pero sí aportará sus propias características y sus propias experiencias únicas. En este caso, el sueño de esta persona era viajar al espacio, pero cualquier otro podrá ver cumplido el suyo a su manera en el futuro. ¿Qué tal dar un paseo entre dinosaurios? ¿O visitar una ciudad en un tiempo pasado? ¿O conducir un Formula 1? Evidentemente, la experiencia no será exactamente igual a si la cumpliéramos de verdad, en nuestra realidad, pero también es obvio que de otra forma no podríamos tener esas vivencias. 

Hasta ahora, ese vídeo es lo más bonito que he visto hasta el momento referente a la Realidad Virtual, y me ha abierto los ojos. Espero que a vosotros también os haya gustado y sirva para que empecemos a ser conscientes de que esta nueva tecnología va a llegar para quedarse, y sus utilidades pueden ser enormes más allá de la industria del videojuego. Todo lo que provoque lágrimas de felicidad debería ser bien recibido.