1. Mundogamers
  2. Noticias

Celebramos el octavo cumpleaños de PlayStation Portable PS3

Una consola que me devuelve a mi infancia
Por Rafa del Río

Justamente hoy hacen ocho años desde que saliera PSP en Japón. La ya veterana PlayStation Portable, que a día de hoy vive como aquel que dice sus últimos y agonizantes días en lo que a ventas se refiere, puede estar bien orgullosa de sus logros en el más que competitivo entorno portátil del mundo de los videojuegos, llegando a ser una de las pocas plataformas que han sido capaces de plantarle cara a la todopoderosa Nintendo. Un tanto siempre a la zaga, sí, pero ahí que ha estado al pie del cañón desde aquel 12 de diciembre de 2008, revolucionando el cotarro en más de un sentido.

 

Para empezar, además del más que atractivo hecho de ser una consola portátil desarrollada por los padres de la marca PlayStation, se trataba de un hardware que destilaba buen hacer por los cuatro costados, además de transmitir una sensación de poderío que traspasaba su nítida y panorámica pantalla. Detalles como el ser la primera portátil en usar como formato de su software discos óptimos (el malogrado y exclusivo UMD), sus posibilidades de cara a internet o la conexión con las otras máquinas de Sony la hacía sumamente interesante si veíamos más allá de un catálogo que se antojaba de lo más apetitoso.

Para el recuerdo quedarán detalles como el intento de sus creadores por hacer del Universal Media Disc un formato viable para el mercado del cine, la horrible cruceta digital del primer modelo de PSP (la PSP-1000) o el bizarro lanzamiento de PSP-GO... pero sobre todo, a PSP hay que amarla por haber gozado de un catálogo de lo más digno. Repleto de morralla a tutiplén, eso sí, pero gozando también de un buen puñado de títulos que bien merecen pasar a la historia del software lúdico por méritos propios.

 

A mi parecer son impagables piezas como Metal Gear Solid: Peace Walker, un juego tan aplastantemente potente como digno de la saga a la que pertenece, tan bueno que hasta en su paso a la alta definición (en Metal Gear Solid HD Collection) apenas delata su proveniencia portátil. O Kingdom Hearts Birth by Sleep, otro juego que, aparte de lo maravilloso de su concepción, supo llegar el hardware de esta máquina a lo más alto. Sony hizo lo propio publicado dos God of War que para nada tenían que envidiarle a los de PS2, e incluso Rockstar tuvo los arrestos de llevar unos más que notables GTA concebidos con PSP en mente, con Liberty City Stories y Vice City Stories.

 

 

Pero estas son solo gotitas de un listado bastante petado de auténticos diamantes en bruto: Tekken Dark Resurrection, los Monster Hunter Freedom, Killzone: Liberation, Syphon Filter: Dark Mirror, Resistance: Retribution, Gangs of London, Gradius Collection, Gran Turismo, Patapon, Locoroco, Gods Eater Burst, Prinny, Silent Hill: Origins, SoulCalibur: Broken Destiny, Final Fantasy Dissidia, Echochrome, Everybody's Golf, Castlevania: The Dracula X Chronicles, Pursuit Force, Wipeout Pulse, Socom, los Ridge Racer... ¡incluso el catálogo de PsOne!

 

No obstante, a PSP también se le quiere mucho por el soporte que da al entorno de los emuladores, siendo una de las plataformas más competentes en este sentido; aunque bien es cierto que, para disponer de estas posibilidades, hay que recurrir a maniobras que desde luego no están lo que se dice apoyadas por Sony. Pero esa es una historia en la que no nos vamos a meter; queremos celebrar este octavo cumpleaños homenajeando a una gran máquina y a su genial catálogo de juegazos, muy capaces de hacer a día de hoy feliz a más de uno... y más con los magníficos precios de los que hacen gala. Por ello, muchas gracias por tantos y tan buenos momentos de diversión, PlayStation Portable. Esperemos que PS Vita no decaiga y recoja de manera firme el gran legado que dejas, pequeña guerrera.


<< Anterior Siguiente >>