Castlevania se queda a las puertas de la Next-Gen

Es cierto que estos meses y durante la feria de Colonia, hemos escuchado, visto y probado un montón de juegos que daban la bienvenida a la nueva generación. Todos escrutábamos cuidadosamente cada título que se anunciaba tratando de comprobar las diferencias que nos llegarán con respecto a lo que ya tenemos en nuestras casas. No parece tarea fácil cuando examinamos, por ejemplo, un The Last of Us cuya oferta comprende una alta calidad gráfica y una jugabilidad sorprendente.

Entonces llegamos a Gamescom y nos acercamos a cada stand tratando de probar las nuevas consolas y las ofertas que traerán consigo. No es potencia todo lo que esperamos  obtener en un par de meses. Por supuesto que queremos colores y texturas realistas, movimientos vertiginosos y demás, pero sobretodo queremos un cambio de experiencias. En esta generación hemos vivido intensamente una forma de jugar. El género de los shooter mostraba una y otra vez el mismo concepto que ahora se rompe con nuevas ideas como Titanfall, la conducción, dividida en simulación y arcade, tendrán mucho que demostrar. Y luego encontramos algunos títulos que no innovan sino que corrigen.

 

 

Eso es lo que vemos en juegos como Castlevania que, con una actitud continuísta nos aleja de ese salto que podríamos esperar. No es que Lords of Shadow 2 no guste, a los fans les encantará, pero nos deja a la espera de ver la saga con un cambio en concepto de jugabilidad digno de las nuevas consolas. En este caso Mercurysteam se ha preocupado por ofrecer al jugador, dentro de la misma línea, un juego más pulido. Dejamos a un lado aquellas técnicas divididas en azul y rojo para tener un balance equilibrado de ataques. Como hemos podido probar en la demo, encontramos un ataque a distancia que nos mantiene a salvo pero hace menos daño y, conforme cambiamos a un arma más potente, vamos quedando más expuestos al enemigo. Quizá la compañía ha dejado de lado la idea de una nueva generación a punto de llegar y ha apostado por centrarse en hacer su producto más acorde con sus ideas y sacarlo ya.

 

Quizá en sagas como Castlevania de Mercurysteam, y tratándose de una tercera parte, podamos perdonar que no se reinvente en cuanto a mecánica, pero en nuevas IPs o en entregas de otras franquicias más ambiciosas, necesitamos algo nuevo. Es como si las compañías tuvieran a su espalda la responsabilidad de hacernos sentir que nos encontramos ante un cambio importante, que en unos meses miremos hacia atrás y pensemos ¡guau, vaya cambio! Castlevania Lords of Shadow 2 no nos pone en esa situación, simplemente cierra un ciclo del cual, si nos gustó Lords of Shadow y Mirror of Fate, necesitamos un final. Aunque para futuros proyectos Mercury Steam deberá trabajar duro para ponerse a la altura en esa Next-gen.

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