Call of Duty Black Ops III. Muchas ganas de meterle mano

Hacía tiempo que no me pasaba con un Call of Duty. Desde el primer Black Ops que no me encontraba tan hypeado por uno de ellos, pero esta tercera entrega de Treyarch ha vuelto a despertar mi interés por el inmortal shooter. La culpa de ello la tiene todo el contenido que se ha anunciado para el título. Por una parte tenemos un modo historia que se podrá jugar hasta con cuatro jugadores, y estos podrán ir ganando habilidades para avanzar de una manera u otra, anunciando la necesidad de construir estrategias para lograrlo. Los escenarios se abren, olvidando, al menos un poco, la extrema linealidad de la marca.

 

Si ya se insinuó en Advanced Warfare el haberse fijado en Titanfall, aquí ya se hace sin ningún pudor, consiguiendo un juego más vertical; que no solo gana en altura sino también en profundidad, pudiendo sumergirnos también en el agua. El multijugador encierra dos facetas: el modo zombies, que aunque de él todavía no se sabe nada, sí se ha hablado ya de darle una vuelta de tuerca al mismo, añadiéndole trama, personalización y más profundidad, y el multijugador.

 

 

Para el multijugador nos encontramos el sistema Specialist, en el que tendremos que escoger a uno de entre nueve personajes para luego equiparlo como queramos. La gracia de esto del Specialist es que nos acerca a Destiny, teniendo cada uno un arma propia y especial y una habilidad concreta, además de la evolución de cada personaje, que se hace de manera individual.

 

Este hype que tengo me llega por la capacidad de Call of Duty de copiar para avanzar; sí, copiar, porque entre lo que coge de Destiny, de los aumentos de Deus Ex (uno de los especialistas hasta podrá retroceder en el tiempo), y los saltos de Titanfall, este Call of Duty se me presenta como algo distinto tras el empacho que me metí de Black Ops.

 

Además, no es un estudio cualquiera el que lo trae, sino Treyarch, que aunque los Call of Duty más populares hayan llegado de la mano de Infinity Ward, a mí que me perdonen, pero es Treyarch el que me me hizo caer seducido por la franquicia.

 

Y todo ello siendo el primer Call of Duty de nueva generación, sin tener que estar lastrado por Xbox 360 y PS3. Lo dicho, tengo muchas ganas de jugar a este Call of Duty Black Ops 3; aunque eso sí, saber que ya hay un pase de temporada de 50 € hace que el hype se convierta en una expectación moderada.

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