Borderlands y su peculiar sentido del humor
Como os comenté esta semana, he descubierto la franquicia Borderlands (llegando muy tarde, sí) gracias a Una colección muy guapa. He de decir antes de nada que aunque sigo jugando y sigo opinando lo mismo que dije en aquel texto, ya estoy empezando a sufrir un pequeño desgaste y ciertas situaciones comienzan a aburrirme un poquillo, pero bueno, es la relación de toda la vida entre los shooters y yo (más mala que buena).
A lo que venía hoy es a hablaros sobre el extraño humor que atesoran estos juegos. Supongo que la inmensa mayoría ya lo habéis descubierto (hace años incluso), pero es uno de los puntos que más me ha llamado la atención y no en el mejor de los sentidos, precisamente, ya que además era algo que daba por hecho que me iba a gustar. Ahora me diréis que seguramente no me han gustado los chistes de Borderlands porque la intencionalidad en el guión justamente es la de hacer chistes muy malos a propósito (lo he pillado, tranquilos), pero es que eso precisamente es lo que no está bien hecho del todo bajo mi punto de vista.
Creo que en Borderlands se ha intentado aplicar un humor que sí que funciona bastante bien en algunas películas, como podrían ser las maravillosas Hot Shots o Austin Powers, donde la gracia llega precisamente al hacer chistes muy malos. Horrorosos. Y ahí está la magia: son tan malos que al final no puedes evitar reírte. Creo entender que esa es la intencionalidad de Borderlands al ofrecernos ciertas situaciones que provoquen que te eches las manos a la cabeza cuando aplica su ironía gamberra o su parodia en ciertas situaciones. Pero la verdad es que a mí no me ha hecho gracia y en algunos momentos me ha dado la sensación de que no está del todo bien aplicado.
¿Por qué digo que no está bien aplicado? Por una razón muy sencilla: si quieres llegar a ofrecer ese tipo de humor debes centrarte en ello, pero Borderlands va de un lado para otro dando tumbos. En ocasiones intenta ser irónico, en otras no, la mayoría de veces tira de estos chistes malos pero también hay veces en que intenta ser más sutil... Hay situaciones que sí me han hecho gracia, como en una de las misiones en The Pre-sequel donde todo se basa en plantarte delante de un tío e insultarle y, una vez que lo haces, grita desconsolado. Pero después de eso te encuentras con algunos comentarios y escenas que son para ponerse a llorar (en el mal sentido). Creo que cuando trata de aplicar un humor malo a propósito no consigue llegar a ese punto que te haga decir "¡es tan malo que me hace gracia!" y cuando lo intenta en el otro sentido, tampoco. La sensación final es la de que no tiene una personalidad definida del todo y no he sabido entender todavía lo que me quiere decir o la forma en que me quiere hacer reír.
Así que al final he terminado con un regustillo amargo con este asunto. También es cierto que ha sido a The Pre-Sequel al que más horas he dedicado, ya que con la segunda parte apenas he avanzado más allá del principio (aún así me hace la misma gracia: ninguna). No sé si tendrá que ver que 2K Australia ha sabido aplicar peor este sentido del humor al último juego de la saga y ese ha sido uno de los motivos por los que les han chapado el chiringuito hace unos días, pero no sé, mi sensación en general con los dos juegos hasta ahora es la misma.
Quizás hay que tener una predisposición para que te haga cierta gracia o, simplemente, yo no he sabido pillarlo. Aún así, mi conclusión es que no he terminado entendiendo hacia dónde quiere ir con su guión ni hacia dónde va enfocado su sentido del humor. Tampoco me parece que el propio juego lo sepa del todo en ocasiones. A mi modo de ver las cosas (entiendo que alguien opine lo contrario) no está bien ejecutado.
No, Borderlands no me hace ni pizca de gracia.
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