Bienvenido de nuevo, Gjallarhorn
Bungie ha terminado hace poquito su primer streaming sobre Destiny Rise of Iron, o como lo llamaremos en español, Destiny: Los Señores del Hierro. Debo decir, sin que sirva de precedente, que me gusta más el nombre traducido que el original. Pero no hablemos de tonterías y hablemos de cosas con fundamento, porque se han comentado muchos detalles interesantes, a pesar de que este streaming sirve de presentación y habrá muchos otros durante el verano para anticipar la nueva expansión.
En primer lugar, sí, el Gjallarhorn ha sido actualizado al Año 2. Seguramente, no sea ni remotamente tan potente como lo era en su primera encarnación, pero poco importa porque 1) será mucho más fácil conseguirlo; 2) es el maldito Gjallarhorn. Lo de que es mucho más fácil conseguirlo tiene trampa, porque podrá obtenerse como recompensa al terminar una misión dentro del juego, pero mucho antes si reservamos la expansión. Al pagar por anticipado, te llevas el Gjallarhorn, algo que es horrible (porque todas las recompensas por reservar lo es) y un poco contra el espíritu místico del arma; pero los tiempos cambien y mejor esto que sufrir la aleatoriedad del juego otra vez.
Otro aspecto importante: nueva raid, de la que no sabemos nada; nueva zona en la Tierra, que se llama en inglés The Plaguelands; nuevo entorno social, que tendremos que reconquistar mientras jugamos a la expansión (eso mola mucho) y nuevos enemigos, que se llaman Splicers.
Los Splicers son unos caídos que han mutado debido a las modificaciones sufridas o hechas por ellos mismos al emplear la tecnología de Shiva, que es un ente o un algo que los Señores del Hierro enterraron sacrificando su vida y que parece haber regresado de nuevo. El tema detrás de toda la nueva expansión es esa: eso que los Señores de Hierro murieron matando ha regresado, así que tenemos que estar a la altura como guardianes y convertirnos en los nuevos Señores para combatirlo y acabar con ello definitivamente.
Por supuesto, todo esto se hará con nuevas armas y piezas de armadura sobre las cuales no sabemos tampoco nada, solo que el equipo en general tendrá retazos tanto de la tecnología de Shiva que usan los Splicers como del equipo de los Señores del Hierro, aunque este no estará directamente relacionado con lo que obtenemos en el Estandarte, que es directamente una imitación de lo que aquellos vistieron. Hay también un nuevo arma, el hacha de doble filo que se ha visto usar a Lord Saladino. Por desgracia, será un arma como la Espada de Crota que solo usaremos en momentos determinados durante la aventura y que no podremos equiparnos libremente.
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En general, todo esto suena bien, a excepción del precio: 30 euros. Si incluye tanto contenido como El Rey de los Poseídos, creo que todos estaremos más que satisfechos por reservarla por ese dinero y llevarnos un Gjallarhorn negro, pero cuando las últimas actualizaciones han sido gratuitas y con micropagos... Uno ya sospecha de qué pueden darnos pagando dinero por adelantado por nuevo contenido. La estrategia de Bungie es complicada ahora mismo.
Además, todavía no sabemos casi nada: no se ha hablado de los nuevos cambios y novedades del Crisol, tampoco se ha dicho nada de la nueva raid, del nuevo asalto ni de cuáles recuperarán del Año Uno. ¿Habrá nuevas armas exóticas? ¿Cuántas nuevas misiones tendremos? De momento, el streaming de Twitch de hoy ha servido para crear hype a una comunidad que se vuelca por completo con cada poquita cosa que se le da.
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