Beyond Good and Evil 2 ¿En serio es oficial?

Ya es oficial, o mejor dicho, casi. La semana pasada, la publicación Eurogamer clamaba a los cuatro vientos que Ubisoft casi reconocía públicamente el desarrollo de Beyond Good & Evil 2. Ha sido sencillo, sin duda, para conseguirlo sólo ha hecho falta que Michel Ancel, responsable de Rayman y BG&E, fundara su propio estudio.

 

Se va pero no se va

Algo así como Goku en Dragon Ball, un estupendo ejemplo de 'acción-reacción', aunque sin Thalia, afortunadamente. Tras anunciar Ancel la fundación del nuevo estudio, Dubbed Wild Sheep Studio -empresa de desarrollo indie situada en Montpellier compuesta por trece miembros-, Ubisoft se ha dado prisa en reunir las siete bolas de dragón y confirmar que, aún así, la estrella sigue formando parte de sus filas.

 

Xavier Poig, director jefe de los estudios de Ubisoft Annecy, Paris y Montpellier, así lo dijo a Eurogamer: 'Somos afortunados de tener algunos de los mejores talentos de la industria, entre ellos Michel Ancel, trabajando con nosotros en nuestros estudios'. Tras marcar territorio en la pierna del desarrrollador, añadió 'Además de dedicar algo de tiempo a su nueva aventura, Ancel está liderando el desarrollo creativo de varios proyectos seleccionados en Montpellier Studio. Entre ellos uno muy ambicioso que está muy cerca del corazón de Ancel y su equipo'.

 

Para terminar de 'aclarar' las cosas y movidos por las preguntas de Eurogamer, Ubisoft añadió lo siguiente: 'Ancel y su equipo están trabajando con las bases de BG&E. Están trabajando en algo que promete romper el concepto de secuela tradicional y superar la tecnología de la nueva generación para mostrar algo realmente increible, innovador y excepcional'.

 

 

Es míííío...

A nadie se le escapa que Ancel desea ver su juego en las noticias. Primero fue una secuela que no llegó, luego unas declaraciones acerca de lo que iba a ser, unas palabras sobre el pequeño estudio que pretendía huir de lo de siempre, un vídeo de supuesto gameplay, la imagen de Jade... Y cuando parece que al amigo Michel se le incha cierta parte de su anatomía y decide abandonar el estudio, plaf, su golpe en la mesa es respondido por 'el compromiso Ubi': Estamos trabajando en ello. 

 

Es divertido ver como Xavier (El de Ubi, no el de los X-Men) se ha precipitado a informar a los medios de que Ancel sigue con ellos, trabajando en algo que parece ser Beyond Good and Evil 2 pero que no se confirma que lo sea. Y mejor aún como la compañía vuelve a responder hablando de BG&E, diciendo que se está trabajando con sus premisas en algo 'que va más allá de una secuela' y que va a ser la caña de España, quiero decir... de Francia. 

 

Pero con todo lo dicho no parece tan claro que efectivamente estemos hablando de una segunda parte de las aventuras de Zerdy y Jade. Por mucho que me fastidie, no alzaría las campanas al vuelo taaan pronto. Lo que vivimos la semana pasada fue un cruce de sentencias a cual más intensa entre un trabajador y su 'jefe'. No se ha hablado de tiempo, no se han mencionado plazos y ni siquiera se ha confirmado de forma oficial y aplastante más allá de ese 'trabajar con las bases de BG&E' que puede siginificar muchas, pero muchas cosas. 

 

Sea como sea, estoy feliz

Ancel monta su estudio, y eso es bueno porque aunque el amigo Xavier (Charles no, Roig) lo mire un poquito por encima del hombro con ese 'además de dedicarle algo de tiempo a su nueva aventura', estoy convencido de que esa Oveja Salvaje nos va a dar algo grande. Por otra parte obliga a Ubi a mover ficha con su 'proyecto ultrasecreto que lo flipas que todos piensan que es BG&E2 y nosotros casi lo confirmamos', y eso hace suponer que en breve tendremos más noticias sobre él. 

 

 

¿Entre nosotros? Con saber que bebe del universo de Beyond Good & Evil yo ya estoy contento. No necesito una secuela como tal, me bastará con volver a encontrarme un universo bien majo que me sorprenda, que me deje explorarlo a gusto y que tenga ese toque personal tan especial y diferente que Ancel sabe dar a sus obras.  Ahora sólo queda esperar... Después de más de seis años no vamos a asustarnos por eso, ¿no?

 

¡Nos leemos! 

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