Adiós, Gamescom. Hola, Tokyo Game Show

Sony lo ha petado en la Gamescom; vale, la Vita se queda al amparo de los mimos que le va a dar Namco-Bandai con una ristra de juegos que sacará para este año, y ellos como que pasan. Sí, tampoco han anunciado nada a corto plazo, pero entre Wild, saber más de Bloodborne, ese Tearaway (que no me ha emocinado demasiado, pero eh) y esa maravilla de vuelta a los ruedos de Silent Hill, a Sony no hay quien la tosa.

 

Con la Gamescom enseñando sus ultimas cosillas, toca ya pensar en el Tokyo Game Show. Y no os lo creeréis, pero ya han anunciado una ausencia; lo sé, parece imposible pero allí no estará The Last Guardian (increíble, ¿eh?), que sigue haciendo honor a su título de “last”, y saldrá el último, pero cuando tengamos ya las luces apagadas y nos importe ya el juego un pito.

 

 

Pero lo que sí que habrá, que también lo han dicho, será el anuncio de nuevas cosas; e igual puede que hasta se animen a mostrar algo para Vita; que sí, que estaréis pensando: venga, Mou, deja de dar la paliza con la Vita, que está más muerta que el propio The Last Guardian; pero tras los éxitos cosechados tras el lanzamiento de Freedom Wars, yo conservo la fe. Eso sí, si tras este TGS no sale nada, prometo dejar de dar la paliza con la portátil.

 

Aunque, sinceramente, y con la mano en el corazón lo digo, tengo muchas más ganas de que sea Microsoft la que arrase en la feria japonesa; difícil, ya. El mundo de los videojuegos no es mejor cuando una compañía tiene cosas más interesantes bajo su ala que las demás; es al contrario: los videojuegos son mejores cuando todas tienen material interesante en sus filas.

 

Tras el anterior E3, mi alegría fue mayúscula porque Nintendo me vendió una Wii U, ahora quiero que Microsoft me venda su máquina, ¿y cómo hacerlo? Como un freak malo que soy de todo lo japonés, pues con eso. Para empezar con Scalebound, y de ahí para arriba.

 

El TGS tendrá lugar el 18, 19 y 20 de septiembre. Por ahora ya sabemos que para PS4 aparecerán más títulos que Sony no pudo incluir en la conferencia europea a causa del escaso tiempo. Con ese hype, toca ahora averiguar qué hará su competencia: Microsoft en terreno hostil y Nintendo en su feudo, con una Wii U que está luchando por destacar (yo ya sé que me voy a comprar una); y eso sí, a ver qué vemos de 3DS.

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