Avance Mario Kart 3D 3DS

Hay un detalle que, en nuestras pequeñas andanzas con Nintendo 3DS, hemos detectado prácticamente en todas las ocasiones y de la que ya os hablamos en los artículos de Super Street Fighter IV 3D Edition. Y es que cuando tenemos activado el efecto 3D, se note más o menos el efecto, los gráficos se presentan de una forma limpísima, con unas líneas de dibujo bien trazadas, como apreciaríamos un monitor a su resolución nativa, por ejemplo, o sencillamente, una pantalla en alta definición. Sin embargo, cuando se pasa al 2D, la pantalla se torna algo borrosa, como si no estuviera enfocada del todo, y toda esa nitidez que habíamos visto se pierde. Mario Kart es el primer juego que vemos de todo el catálogo de Nintendo al que no le pasa eso. En absoluto.



Y parece una tontería, pero cuando no te apetece jugar en 3D estereoscópico se agradece. Pero no es lo único que sorprende de Mario Kart 3D (ya no sabemos si se llamará así y si todos los juegos de Nintendo se van a llamar como siempre pero con el 3D detrás). Es un Mario Kart auténtico, quizá aún con algo menos de personalidad hasta que no descubramos todos sus detalles y sus nuevos circuitos, pero auténtico, porque es muy fluido, no hay ningún tipo de traba en el control ni tiene tanto que demostrar como les ocurre a los Mario Karts de plataformas de sobremesa. Un Mario Kart de portátil siempre será una apuesta segura.

De lo más nuevo que pudimos ver, destacan sobremanera los elementos que ya vimos en el trailer. Esto es, ese parapente que aparece de nuestro vehículo como si fuera el del Inspector Gadget, y esa hélice para los circuitos marinos que nos dan un empujón extra y un nuevo factor jugable durante las carreras. Además, cosas que no se vieron en el trailer, estos nuevos juguetitos pueden combinarse con los ya vistos hasta la fecha, así si tenemos toda una ristra de champiñones de velocidad, podremos impulsar nuestro ala delta por los cielos para evitar aún más obstáculos de la carretera.

Aún es pronto para saber si este nuevo esquema puede llegar a quebrar un poco la jugabilidad de un Mario Kart, pero en el fondo, el juego siempre ha sido una mezcla de habilidad y caos mundial, donde cualquier cosa puede pasar. Lo más probable es que tanto el ala delta como la hélice acrecienten este hecho.

Los circuitos, por otra parte, también se han tenido que amoldar a este nuevo factor, así que es de esperar que veamos cantidad de saltos por doquier con rampas de impulso para aprovechar su uso, aunque todavía está por ver cómo se comportan los circuitos clásicos del juego, dando por hecho, sin mucho temor a equivocarnos, que vamos a ver algunos de vuelta.

Mario Kart 3D es (sigue siendo) una apuesta segura. Fue probarlo y volver a decirnos a nosotros mismos que este es el juego al que más le vamos a dar en los primeros años de la consola, y con el que más haremos campaña de cara a la futura compra de una 3DS por nuestros amigos jugadores cercanos para poder volver a hacer, en el fondo, lo que hacíamos hasta ahora: jugar al mismo juego sí, pero con los suficientes alicientes para que parezca toda una novedad.

Y esto es lo que hace Mario Kart. Se sabe a nuevo, se ve a sí mismo atractivo, y pierde el miedo a entregarnos nuevas cotas jugables en cada entrega (nota del autor: hemos perdido para siempre el truco del derrape). En esta ocasión, el dinamismo de ir rápido por tierra, mar y aire. ¿Qué será lo siguiente? Nintendo sabrá, nosotros estaremos tan enganchados con el que toque que no lo echaremos en falta.

Ficha técnica

Salida: Finales 2011

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