Avance Metal Gear Rising Revengeance ,PS3,PC,X360

Lo llevo diciendo desde que se supo que el devenir de Rising dependería del buen hacer de Platinum Games: una venganza es interesante, pero una revenganza es lo más cojonudo que le puede pasar al hack and slash hoy en día. Además, como si de un cómic americano se tratase, estamos ante un crossover que debería hacer historia: los ex-Clover dan la mano a los de Kojima Productions en una dupla de ensueño. La unión de ambos estudios debe dar lugar a uno de esos juegos genuinamente nipones que tanto hemos echado de menos durante la generación. Ellos estaban totalmente convencidos de que su cooperación en Rising era un auténtico triunfo para el desarrollo japonés, pero los que se benefician de ello es todo el universo videojuego.

Estamos en los últimos meses de un atropellado desarrollo que desesperó a Kojima y que obligó a buscar ayuda en otro estudio tan oriental como el sushi y la katana: Platinum Games. Con el juego en sus manos todos nos tranquilizamos: el nuevo enfoque de la obra se servía en bandeja de plata ante uno de los mayores expertos en acción desenfrenada de la actual y pasada generación. Los afortunados poseedores del ZOE HD Collection ya han podido hincar el diente a una demostración de Rising y a mí, personalmente, se me antoja complicado que el juego pueda empeorar más allá de lo visto en la corta demostración.

No me contenté con jugarla una o dos veces: el disco parece estar rallado ante mi afán por encontrar nuevas cosas y descubrir rincones más íntimos dentro de sus paisajes. He podido encontrar cosas interesantes y estoy convencido que según avancen las horas de juego y podamos hacernos con nuevas habilidades y armas el juego irá in crescendo. Muchos elementos del escenario, de hecho, podremos usarlos a nuestro favor, y algunas armas podrán ser tomadas para aumentar nuestro arsenal en situaciones concretas. Espero que no sean tacaños con esa dosis armamentística extra, ya que podría nutrir de nuevas posibilidades a su peculiar puesta en escena.

Hay algo que me ha impactado del proyecto Rising y que siendo sincero ya había descartado por completo ante su nueva concepción: parece que la historia llevará el sello Kojima, y tener una trama así no es algo habitual en el género. Si repasamos todos los referentes que han escrito con letras de oro la historia del hack and slash comprobarás que rara vez hemos visto una buena narración a sus mandos. En la demo hay tantas líneas de texto que resulta impensable no deducir que hay algo bueno detrás. Ya os digo: no es garantía de nada mi sospecha y ni siquiera ese apartado es excesivamente importante dentro del género, pero podemos estar ante una combinación narración-acción que puede ser estupenda.

Algunos temían que Rising sería una suerte de Bayonetta con Raiden de protagonista, pero parece que esa misma circunstancia es la que ha hecho a Platinum alejarse de su brujita preferida y apostar por ella en su retorno en WiiU. Aquí tenemos otra cosa; un título diferente que apuesta por otras metodologías que nada tienen que ver con la obra de Kamiya, por lo que podemos apartar ese miedo y no dudar en lanzarnos a por él, ya que es probable que no existan mejores opciones de cara al próximo año... a no ser que Ninja Theory nos dé semejante golpe con DmC que nos haga creyentes de su nuevo Dante, pero la tarea parece complicada a pesar de sus buenas intenciones.

Raiden responde a las acciones con dos botones de ataque y sus respectivas combinaciones, en las que tempo y orden son importantes para hacer unos u otras acometidas. Incorpora, además una habilidad que pondrá en carrera al personaje y cambiará todas sus acciones por habilidades más veloces pero menos dañinas. La combinación de dichos movimientos, por tópico que parezca, serán clave para poder sobrevivir. No obstante, la habilidad más interesante incorporada en Rising es el corte, que podemos activarlo en cualquier momento pero que hará mucho más daño como movimiento final con el que cortar como tranchetes a los enemigos.

Dirigimos el corte y cortamos con el stick derecho, haciendo añicos a los enemigos u objetos que se pongan a nuestro alcance. De hecho, y como no podía ser de otra manera, seremos premiados según los cortes y lo feroces que hayamos sido durante ese lance del combate. Cortando en los lugares concretos del cuerpo podremos obtener núcleos que nos abastecerán de energía y vida, pudiendo obtenerlos de casi cualquiera de las amenazas robóticas que nos encontremos a nuestro paso... algo así como pelar una gamba pero con sangre, mucha sangre.

Rising pone cosas interesantes a nuestro alcance que podíamos haber adivinado en un hack and slash, pero jamás podríamos haber imaginado de un Metal Gear. Es un spin off, correcto, pero esa categoría es la que hace mágica y da alas a Platinum para hacer de Raiden el carnicero más sangriento y loco de la actual generación. Es muy probable que la faceta que nos va a mostrar Platinum del niño bueno de Kojima haga tambalear la opinión que más de uno al respecto del protagonista de Metal Gear Solid 2.

¿Qué podemos esperar de cara a su cercano lanzamiento? Rejugabilidad y una primera experiencia lo suficientemente larga y retante para mantenernos sentados durante los posteriores niveles de dificultad a los que nos enfrentaremos. La primera impresión ha sido estupenda, y si mi pálpito de historia potente se hace realidad, tendremos una opción más que interesante para comenzar 2013 con buen pie.