Avance XCOM Enemy Within ,PS3

XCom Enemy Within es como un juego de mesa. Cuando crees que no le puedes sacar más partido, que ya has superado el juego de todas las formas posibles aparece una expansión. Recuerda mucho a una expansión tradicional de videojuego, sólo que en vez de añadir una nueva campaña donde probar todas las novedades a través de una historia funciona como una capa añadida a la campaña principal. Puede parecer extraño, pero así es como se juega en mesa y así es como se juega en XCOM. Lo mejor, que no parece el mismo, ni parecido. La cantidad de nuevos escenarios, nuevas unidades, cosas que hacer durante la partida le añade un plus tan fuerte de profundidad que te sentirás como la primera vez que te pusiste a los mandos.

Además, la analogía con los juegos de mesa no es tan descabellada. Ananda Gudpta, diseñador de Enemy Within, es conocido por sus juegos de tablero entre los que destaca Twilight Struggle, un juego sobre la guerra fría de los más valorados por la comunidad. Además, Enemy Within es una buena oportunidad para aquellos aficionados al juego que quieran volver a pasárselo de nuevo en un modo de dificultad más difícil. El modo clásico es un desafío bastante importante, al que si añadimos el modo Hombre de Hierro puede romper los nervios al más templado.

Balancear un título de estrategia como éste no es fácil. Si ahora piensas en cada uno de los nuevos añadidos, desde armas, unidades, mejoras, la nueva sustancia conocida como Mezcla, etc, puedes imaginarte la complicada labor de nivelar estos pequeños cambios que funcionan a la perfección y hacen que tu campaña sea mucho más larga. Nada de dedicarte a la tarea principal, desarrollar el Lanzaarcos en un santiamén y averiguar qué está sucediendo en la trama. Aquí tendrás que hacer pasar muchos más días para hacer más fuerte tu base, poder defenderla a base de investigar a fondo cada pieza del puzle, a fin de que no decepciones en el campo de batalla. El riesgo es mayor, porque a más tardar más posibilidades hay de que varios países abandonden el Consejo, pero la recompensa es mucho más revitalizante.

Entre todo este puñado de novedades destacan los EXALT. Vienen a jugar la carta de la sociedad secreta de turno, aunque mucho más militar para que se ajuste a la partida, que tienen sus propios planes con los alienígenas y que tendrán su propia historia que tendremos que seguir e investigar. Además, tendremos que avertiguar dónde tienen su base secreta, oculta a los ojos del mundo, creando una capa de profundidad extra. A través de unas células de investigación iremos recopilando pistas y cuando creamos saber dónde se esconden tendremos que aventurarnos. Pero cuidado, un fallo y el país al que apuntes con el dedo puede no verlo con muy buenos ojos y abandonar el consejo.

Jugar contra los EXALT es muy diferente de hacerlo contra los alienígenas. Los alienígenas son fuertes y sus armas poseen una tecnología avanzada, pero hacerlo contra la sociedad secreta casi te hace parecer que lo haces contra ti mismo. Se mueven como tú lo harías, aprovechan los espacios altos mucho mejor y sus guardias son feroces. No hay nadie imprescindible, como piensan los alienígenas, y se cuidarán mucho de tus ataques utilizando a sus excelentes médicos, por lo que tendrás que asegurarte de no dejar escapar a ninguno con vida si no quieres que vuelva a estar listo para el combate.

La base parece no cambiar mucho en el primer vistazo, pero en cuanto empiezas a avanzar los primeros pasos y recoger la Mezcla, descubrirás que hay muchas novedades que multiplican tus opciones. Quizá la más destacada sea la de seguir el camino de la genética o la mecánica, de manera que puedas realizar implantes sobre tus soldados que les den capacidades sobrenaturales o apostar por la fuerza bruta biomecánica con la que tendrán mayor fortaleza y potencia de fuego. Cada una tiene sus ventajas y sus inconvenientes según la forma que juegues, aunque puedes intentar intercalar las dos si tu partida va para largo. Si el nivel de dificultad es alto, probablemente lo hará y podrás sacar más partido a la captura de nuevas unidades, como los fantasmas, unas unidades extraterrestres que entran en un modo sigilo y les vuelve invisibles. Podremos adaptar estos tipos de tecnología para construir granadas que nos darán esa ventaja táctica u otras que nos permitirán respirar el veneno de los reptiloides, por ejemplo. 

Enemy Within sabe muy bien qué tipo de jugador ha alabado el título de Firaxis el pasado año 2012. Es un jugador que no le importa repetir una y otra vez la partida, porque no es un juego de principio y final. Es, como decíamos, como un juego de mesa donde lo importante es la experiencia y ponerte de nuevo a prueba en cada decisión. Las novedades no sólo hacen dicha experiencia mucho más larga y en profundidad, sino que parecen analizarte para que no repitas las mismas tácticas que te llevaron a la victoria la otra vez. Por ejemplo, la Mezcla, la sustancia que necesitarás para modificar genética o mecánicamente a tus soldados, estará en cada misión, tentándote a que te precipites y vayas a por ella, porque si tardas demasiado, detonará y no nos será útil, haciendo que los jugadores que se mueven por casillas azules a la espera de cualquier imprevisto tengan que optar por un juego más ofensivo si quieren recuperar la preciada sustancia, y en el camino cometer errores.

Lo que llevamos de Enemy Within no podía ser más alentador. Sigue estando ahí la polémica que perseguirá a esta expansión, ya que no posee una historia propiamente dicha, totalmente nueva que, por ejemplo, nos cuente lo que sucede tras los acontecimientos de Enemy Unknown, y eso no gustará a algunos jugadores que tengan la sensación de que están andando sobre terreno conocido, pero una vez que te pones a jugar, lo cierto es que esto es lo primero que olvidas, mientras investigas como si fuera la primera vez las nuevas posibilidades que ofrece. El otro tema a cuestión es la versión de consolas, que unirá los dos juegos encareciendo un poco el producto final, en vez de convertirlo en un DLC como sí lo hará la versión de PC, pero con el precio que el juego tiene en compatibles y los pocos recursos que necesita, además del género al que se debe este título, muchos jugadores podrán optar por esta versión. Lo que encontrarán es tan endiabladamente divertido que puede que, cuando te quieras dar cuenta, ya lleves dos meses dentro de la nueva generación y ni siquiera la hayas echado de menos.