Avance The Last of Us: Parte II ,PS4

Naughty Dog tiene la capacidad de lograr que el resto de los videojuegos parezcan feos, toscos y mal dirigidos. Tras ver las cinemáticas y el nuevo gameplay de The Last of Us II me ha costado mucho seguir con los demás vídeos de las otras editoras, porque lo que ofrece este título, su honestidad, trabajo, esfuerzo y mensaje, es lo más potente que hemos podido ver en este E3 2018.

La conferencia de Sony se abrió presentando a una Ellie con más edad de la que tenía en el original. La recreación gráfica del personaje no solo sirve para sacar músculo y presumir de potencia técnica, también para entenderlo mejor. Lo fabuloso es que ella no aparenta ser mucho mayor, no físicamente, pero sí intelectualmente, aunque, ¿de qué tipo de madurez estamos hablando?. La vida en el apocalipsis le ha enseñado a matar sin piedad, a moverse rápido entre la maleza y los restos de un pasado mejor, a recoger con agilidad armas y elementos útiles, a tomar decisiones y a ser efectiva y poco afectiva si se trata de rebanar gaznates.

Naughty Dog ha apurado el constructo jugable del original. Existe un cambio sustancial entre jugar con un Joel primerizo en este universo y una Ellie que ha nacido en él. No tiene escrúpulos, reparos ni remilgos. Maneja su puñal con soltura, conoce el terreno y sabe moverse en él. Resulta interesante que durante el tramo ingame que se nos ha presentado, Ellie no haga ningún comentario con respecto al tipo ahorcado que cuelta de una farola, porque ya está acostumbrada. Cuando ve cómo apuñalan a alguien solo dice ‘Jesús’, pero sin asustarse demasiado. Porque ese es su día a día.

Se mantienen los ritmos en el uso de armas, que al ser equipadas y recargadas demuestran que no son de paja y que Ellie no es Hulk. La cámara también colabora en el refuerzo de esta sensación, pues al agitar una herramienta pesada como arma cuerpo a cuerpo, esta se arrastra siguiendo su trayectoria, representando la propia fuerza y esfuerzo de la chica, pues le cuesta hacerlo. Se recoge la investigación que Naughty Dog realizó en Uncharted 4 en lo que se refiere al enfrentamiento contra enemigos y aprovechamiento del entorno. Ellie desarrolla sus movimientos de una manera similar a Nathan, lo que vuelve a recordarnos que ella es una profesional del entorno, como el arqueólogo lo era también a su manera.

Es todo un acierto que se pueda esconder debajo de un camión para librarse de sus adversarios, pero es aún mejor cómo estos tienen la capacidad de encontrarla y generar una batalla con ella en los bajos del vehículo. En lo jugable se denota una tremenda fluidez entre las distintas secuencias que jugamos: pelas, disparo y persecuciones. De nuevo, se evoluciona con respecto a Uncharted 4, también en la interacción con objetos. Ellie recoge cosas mientras corre, emplea a los enemigos como tales y sin que la jugabilidad parezca resentirse, lo que nos da pistas de lo bien conectadas que están las distnitas mecánicas.

Está tan bien construida la madurez en cuanto a la relación con su entorno en lo jugable que da hasta pena que tengamos que seguir recurriendo al HUD para según qué cosas. Si alguien se acerca a nuesto lado, aparece un avisador de color y lo mismo ocurre con los impactos. No es que estén mal estas pistas visuales, por supuesto, pero empañan la elegancia del conjunto.

Empezaba el artículo hablando de que Ellie es madura, pero solo en relación a su entorno, y aquí viene lo interesante. Naughty Dog no solo nos ha presentado una jugabilidad que toma lo mejor de Uncharted 4 y lo usa para optimizar la de The Last of Us original, no, también nos ha enseñado una emocionante escena de vídeo que nos recuerda que la protagonista aún es joven en lo que respecta a lo afectivo. Sabe matar, sabe esconderse y no tiene miedo a que le partan la ceja de un golpe, pero todavía está descubriendo cómo amar y cómo ser amada. Es precioso el momento en el que recibe un beso, se asusta, se confunde y luego se alegra. Es feliz. Este es un conjunto de emociones que no exhibe cuando le quita la vida a sus adversarios, porque en ese momento no es persona, es 'profesional'.

Todo esto podemos saberlo gracias a cómo el estudio ha empleado lo técnico, pero también a la dinamización de la jugabilidad primigenia. En pocos minutos se nos ha contado el contraste interno de una mujer que ha crecido demasiado rápido en lo que se refiere a su condición de asesina, pero que aún es una niña en materia de amor. Sinceramente, me ha parecido un trailer precioso, lleno de fuerza y que vuelve a demostrar lo bien que sabe escribir personajes Naughty Dog. Eso sí, ahora el resto de los videojuegos del E3 2018 me parecen feos, superficiales e intrascendentes.