Avance For Honor ,PC,PS4
No me canso de decir que cuando Ubisoft se pone a innovar, no hay quien la pare, y el papel que ha tenido en este E3 2015 ha sido de quitarse el sombrero, aún a falta del siempre soñado Beyond Good & Evil que se convertirá junto con un nuevo Metroid digno y Half-Life 3 en los nuevos The Last Guardian, Final Fantasy VII Remake y Shenmue 3. For Honor ha sido, sin duda, su punta de lanza este año. La metáfora medieval viene a cuento, y es que For Honor es un juego basado en batallas multijugador entre caballeros y castillos, con una mezcla muy interesante de conceptos que ya nos son conocidos como la captura y defensa de puntos concretos de un mapa o la aniquilación de minions ‘de relleno’ previa al enfrentamiento entre héroes, que es ni más ni menos que la parte más interesante de For Honor. ¿Conocéis Nidhogg? Si no lo conocéis, deberíais descargarlo ya y descubrir sus agilísimos enfrentamientos de esgrima. Puede parecer que no tiene nada que ver ese entorno 2D con los combates que nos propone For Honor, pero en el fondo, sí, ya que se basa en ataque y defensa en tres posiciones distintas, obligándonos a hacer coincidir el lado con el que defendemos con el lado por el que nos atacan, y a su vez buscar las aperturas en la defensa del enemigo para atacar. En Nidhogg es arriba, centro y abajo y en For Honor es arriba izquierda y derecha. Por explicarlo de una forma clara, si un ataque viene por la posición de arriba, la defensa en la posición de arriba bloquea el ataque. La idea es la misma, pero la ejecución es muy, muy diferente, y no sólo porque aquí no podemos lanzar la espada. For Honor nos obliga a medir muy bien los tiempos de cada ataque, rápido o pesado, ya que desde la defensa aún se puede reaccionar una vez que la animación del atacante comienza y se puede cambiar la posición para bloquear correctamente, pero el atacante también puede jugar la carta del pequeño empujón que rompe la defensa enemiga y continuar con un espadazo rápido. Es un sistema de combate que tras conseguir acostumbrarse a que hay que mantener la posición de guardia, se vuelve muy intuitivo. Pero claro, hay que tener en cuenta que aquí no sólo entran en juego los combates 1v1, sino que hay cuatro jugadores por cada equipo y tres puestos que capturar y defender, y la estrategia a seguir de cara a la victoria (quien antes consiga la puntuación máxima) puede dar muchas vueltas contando con que, bien repartidos, siempre habrá un puesto más vulnerable que otro ya que no todos pueden ser cubiertos por dos jugadores, algo que supone una ventaja enorme contra alguien en solitario. En general no deja de ser un concepto de MOBA básico. Cada jugador con su propio personaje (se podrá escoger entre templarios, vikingos y samurais, por ahora sólo se puede jugar con los primeros), cada personaje con sus propias habilidades especiales, y todo ello puesto sobre un escenario en el que saber compenetrarse es la clave. Hace falta trabajo de equipo, hace falta hablar, hace falta que un compañero diga que necesita ayuda porque ha visto a dos enemigos yendo a recuperar el punto B y requiere la compañía de al menos un aliado más para igualar las tornas.
For Honor es una experiencia nueva. Es una de esas mezclas de conceptos que por sí solos no tendrían sentido o no serían nada del otro mundo, pero que bien unidas da como resultado un juego bien interesante. Quizá no sea interesante para todos, claro. Quizá haga falta saber si el jugador al que le gusta jugar solo tendrá algo también para él en For Honor, pero por ahora, lo que ha sido presentado ha sido toda una sorpresa, una de las mayores de todo el E3 2015 que ya tiene toda mi atención para ver cómo evoluciona a medida que se acerque su lanzamiento.
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