Avance Assassin's Creed IV Black Flag ,PS4,PS3,WIIU

Es fácil pensar que la llegada de un nuevo Assassin's Creed justo cuando aún no hemos terminado de digerir el anterior pueda parecer algo precipitado, pero los números hablan y, en términos de negocio, la franquicia de los asesinos funciona a las mil maravillas para Ubisoft. No es de extrañar pues que una cuarta entrega (sexta si hacemos números y obviamos las aventuras portátiles) se avecine justo cuando parece oportuno aprovechar el advenimiento de las nuevas máquinas, aún cuando el juego hará igualmente acto de aparición en Xbox 360 y PlayStation 3.

En vista del éxito obtenido con las batallas navales de Assassin's Creed III, esta próxima iteración dará gran parte del protagonismo a los entornos marítimos, surcando una y otra vez los mares viento en popa y a toda vela. Pero Ubi no se olvida de los orígenes de la saga, y a pesar de que la premisa argumental de controlar al pirata Edward Kenway lleve a pensar que la trama se alejará de los asuntos templarios y sus conspiraciones. En este sentido, cabe citar que nuestro protagonista es el padre de Haytham y el abuelo de Connor, las dos piedras angulares del anterior Assassin's Creed.

Más allá de la mar salada tendremos como escenarios principales las ciudades de Kingston, La Habana y Nassau, sometidas respectivamente bajo la influencia de Inglaterra, España y los piratas. En total serán unas cincuenta las localizaciones a explorar, repartiéndose prácticamente a partes iguales los escenarios terrestres con las partes marítimas. Así, la sensación de mundo abierto que lucirá Assassin's Creed IV será mucho más palpable que la vista en anteriores títulos, abriéndose pronto y concediendo muchas menos restricciones en cuanto a progresión y libertad.

Fortificaciones de todo tipo, frondosas junglas, viejas ruinas y pequeños poblados serán algunas de las localizaciones por las que luciremos palmito, jugando en este sentido con aquellas actividades que realicemos como piratas. La posiblidad de abordar al enemigo, hacernos con sus barcos, entablar épicas batallas o, simple y llanamente, acercarnos a una playa para saltar y nadar hacia la orilla son momentos diametralmente opuestos y, con todo, dignos de mención. Ubisoft hará que todo cobre vida en un sentido jugable que elevará a la enésima potencia la sensación de que estamos ante un Assassin's Creed ciertamente potente.

Ya veréis lo genial que es estar de fiesta con nuestros amigos piratas a pie de playa, a un paso de adentrarnos en una jungla repleta de misterios (atención al nivel de detalle). Quizás allí descubramos una conspiración que nos lleve a las viejas mecánicas de la saga, y nos sorprenda de repente un masivo ataque naval del enemigo, que nos hará correr raudos de nuevo hacia la playa y montarnos en nuestro navío, armando los cañones y dando comienzo una batalla donde una realista combinación de fuego y agua tendrán su protagonismo en lo visual, alcanzando su cénit en cuando a definición y suavidad de cara a Xbox One y PlayStation 4.

Poco más se puede decir de este Black Flag, puesto que, a pesar del notable espectáculo pirotécnico, se trata de una entrega en sí bastante conservadora. Es de esperar que nos sorprenda en lo que a guión y recursos jugables se refiere, mientras rogamos para que el título no se convierta en un tutorial de horas que confieran con crueldad el hastío más severo. Ubisoft debe aprender de una vez por todas, aprovechando que con Assassin's Creed tiene una importante base jugable que utilizar en el mejor de los sentidos.