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MGRetro | Hostages ps3

Sábado 12 de Septiembre de 2015 por Rafa del Río

En 1988, la compañlía francesa Infogrames sacó un título que rompía con todo lo visto anteriormente y que traspasó fronteras con un éxito demoledor. Hostages nos invitaba a solucionar una crisis de rehenes en París, utilizando para ello un equipo de seis hombres y un total de cinco géneros mezclados en el que el sigilo era uno de los más importantes. 

 

A les enfants de la patrie

O algo así. Hostages nos ponía en la piel de un jefe del GIGN -Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional- que debía solucionar una crisis de rehenes en una embajada parisina. Para elo, como decía en la intro, contábamos con un equipo de seis hombres, tres francotiradores y tres miembros de asalto, con los que vaciar la embajada eliminando toda amenaza y llevando a los rehenes a una zona segura.

 

Hostages comenzaba en el centro de operaciones del operativo móvil del GIGN con un mapa de la zona que incluía la embajada, sus ventanas y los edificios cercanos. Como estrategas de la misión debíamos elegir una ubicación para cada uno de nuestros francotiradores y marcarla en el mapa, lo que daba inicio a la siguiente parte del juego.  

 

 

En la siguiente parte del juego debíamos guiar a cada uno de los tres francotiradores en su aproximación a su punto de destino. Con un escenario bastante detallado para la época debíamos movernos lateralmente por unas calles bastante parecidas a las de nuestra ciudad y llegar a nuestro destino. Por el camino debíamos evitar que nos delataran los haces de luz de los focos terroristas, lo que se saldaría con un certero disparo a la cabeza de nuestro hombre y un francotirador menos con el que cumplir la misión. Para evitar la luz podíamos ocultarnos en macetas, ventanas, puertas, tras vallas, en la sombra de los callejones y rodar, reptar por el suelo y hacer todo lo necesario para evitar ser descubiertos

 

Una vez los francotiradores en posición, comenzaban la tercera y cuarta parte del juego, que podíamos alternar según necesitáramos. Por un lado, manejábamos a los francotiradores que hubiéramos conseguido situar, que con sus rifles podían abrir fuego contra las siluetas que se recortaban a contraluz en las ventanas. Corríamos el riesgo de disparar contra un rehén, así que antes de abrir fuego era interesante llamar al equipo de asalto. 

 

 

El equipo de asalto llegaba en helicóptero en una escena bastante chula para la época, y cada miembro se situaba en uno de los laterales de la fachada del edificio de la embajada. Con ayuda de los francotiradores debíamos localizar un buen punto de entrada, una ventana oscura o que acabáramos de despejar, y luego hacer rappel con nuestro miembro del equipo de asalto hasta el punto elegido. La libertad era absoluta y podíamos decidir entre infiltrar a un miembro por planta, infiltrar a un sólo miembro que despejara el edificio y reservar a los otros dos o entrar a saco con los tres, todo muy Rainbow Six

 

Un vez infiltrados los miembros del equipo en el interior de la embajada podíamos ir alternando entre un personaje y otro en un shooter en tercera persona bastante resultón, utilizando a los francotiradores para cubrir a los infiltrados y proteger las ventanas. 

 

 

Todo muy peliculero

Como podéis ver, Hostages era un título muy ambicioso para su época que mezclaba a la perfección varios géneros y una espectacular ambientación, lo que dio como resultado un título estrella que estuvo varios meses en el número uno del ranking internacional. Conocido como Hostage: The Rescue Mission en los USA, Operation Jupiter en Francia y Rescue: The Embassy Mission en su port a NES, Hostages fue un multiplataformas más que sólido que funcionó en todos sus soportes: Acron, Zx Spectrum, Atari ST, Apple IIGS, MSX, Commodore, Amstrad CPC... pero sin duda el sistema en el que lo dio todo fue Amiga 500.

 

Actualmente es bastante sencillo encontrar éste juego en streaming. Fue un hit de la época, aunque su segunda parte, Alkatraz, no tuvo tanta suerte. Lo que sí es seguro es que fue el pionero en plantear de forma realista el trabajo de un equipo especial ocupando diversos puestos, lejos del clásico 'yo contra el mundo' que primaba en los ochenta. Si tenéis un rato y podéis haceros con una copia, es interesante conocer a éste ancestro que no supo mantenerse en la historia y que dio luz a un género en el que se amparan los juegos presentados en el E3 Rainbow Six Siege y The Division.  

 

¡Nos leemos!


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