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Los mejores juegos del año, según Diego Emegé

Un año ecléctico
Lunes 22 de Diciembre de 2014 por Diego Emegé

Ha sido un año raro. En la redacción estamos de acuerdo en que tanto los grandes títulos como el universo indie han visto calidad en 2014, pero no sabemos cómo o dónde se ha quedado la brillantez de otros años. Vaya, que ha resultado un año un poco… meh. En lo personal, he llenado mi año de títulos de primera línea que me han dado buenos momentos, pero por desgracia, hasta ahora no me he animado a meterme con los indies del año, y me arrepiento mucho. Me faltarían en esta lista un This War of Mine y un Nuclear Throne, por poner dos descubrimientos recientes, y los retoños de Nintendo, por falta de consolas, pero he preferido ser coherente con mi verdadera experiencia de juego y no aventurarme con algo que solo serían expectativas o postureo. ¡Allá vamos!

 

 

 

10. Call of Duty: Advanced Warfare

Quería que Call of Duty estuviera en esta lista por una sencilla razón: la saga me había conseguido hastiar hasta lo más hondo de mi ser, pero Advanced Warfare ha logrado que me metiera de lleno en la campaña y que disfrutara de un multi mucho más interesante en comparación con lo que Activision llevaba haciendo años. El final de la campaña es chapucero, y me parece que han desaprovechado al señor Spacey muchísimo, pero el resto del tiempo lo considero bien empleado. En cuanto al multi, exceptuando a los niños rata y que ya me hice a los ritmos y el peso de Battlefield hace tiempo, resulta un cambio relevante y muy divertido, aunque no me resulte tan relevante como Titanfall.

 

 

9. South Park: The Stick of Truth

Tardó lo suyo, pero llegó, y lo hizo con honores. Jamás pude soñar con una mejor adaptación a videojuego de South Park. Como tal, es ideal, sin cortarse en referencias, burradas, parodias ni nada de lo que hace a South Park lo que es. Como experiencia de juego es un RPG entretenido y muy ágil, y a pesar de haber sido creado por gente de fuera de nuestro endogámico medio, resulta la experiencia más políticamente incorrecta que podemos encontrar. Tela. Es un título de presencia obligada en los catálogos de cualquier amante de los RPG y, más que nadie, de los seguidores de la serie.

 

 

8. Monument Valley

Este año lo empecé fortísimo en cuanto a juego móvil, adquiriendo y probando montones de títulos, tanto antiguos como recientes, pero a lo largo de los meses he acabado limitando el uso del Smartphone a la lectura de páginas web o a trabajar, directamente, tanto en metro como sentado al catre. No obstante, hay un solo juego que ha estado ahí durante todo el año, y ha sido Monument Valley. Es corto, no, cortísimo, y eso me duele muchísimo, porque es fantástico de jugar. Es un juego-regalo, porque tiene lo visual, lo sonoro y también un genial concepto de juego, pero por eso mismo ha conseguido darle al ecosistema móvil un aire un poquito más distinguido.

 

 

7. Binding of Isaac: Rebirth

Llevo horas y horas jugadas a la anterior entrega, y Rebirth ya me ha robado un buen porrón de horas. Es como un juego nuevo. No puedo decir que Rebirth me haya inspirado lo mismo que Far Cry 4, porque en este caso la serie ha sumado tantísimas nuevas mecánicas y tantos elementos sensoriales que la experiencia parece completamente distinta. Hay montones de conceptos que han pulido y han añadido otro montón más, pero lo mejor es que por mucho que creía haber aprendido a jugar, ahora me siento totalmente lerdo, y eso es maravilloso, porque Binding of Isaac es de los juegos que menos me cuesta ponerme a jugar.

 

 

6. NBA 2K15

Nunca me había obsesionado tanto con un deporte como cuando empecé a jugar a NBA 2K15. Ahora estoy mucho más sosegado en ese aspecto, porque el frío y la falta de tiempo cambian costumbres, pero sin duda el equipo de Visual Concepts logró superarse con esta nueva entrega. Lo único que me da rabia es saber que el próximo año seguirán superándose. Este año nos lo dieron todo, en forma de modos y de experiencias de juego redondas, me pregunto cómo lograrán superarse el próximo año.

 

 

5. The Talos Principle

Para mí The Talos Principle es el hallazgo del año. A caballo entre la filosofía y el puzle, es una experiencia que no deja de ejercitar el cerebro. Ya comenté en mi análisis que era una pena que no se mezclaran las dos principales partes que lo componen, pero al final está resultando una realidad bastante amable. Siempre me apetece jugarlo, y por eso está aquí, pero no siempre me apetece pensar en la consciencia ni demás incógnitas universales. Por otra parte, la parte filosófica siempre está ahí para cuando el cerebro se aturulla de tanto puzle. Vuelvo a recomendarlo, especialmente en estos días de rebajas, porque hay pocos títulos que se le parezcan.

 

 

4. Middle-Earth: Shadows of Mordor

Antes de que comenzaran a salir los packs de contenido descargable, había desbloqueado todos los logros de Shadows of Mordor. Tal fue mi obsesión con el juego. La historia es simple y el sistema de némesis no es tan profundo, pero es un juego divertidísimo. Mezcla lo mejor de muchos mundos y resulta un juego redondo en su expresión de la interactividad. Tiene combates fluidos que pueden extenderse hasta el infinito, un sistema de poderes muy atractivo y logra satisfacer enormemente a cada minuto de juego. 

 


3. Wolfenstein: The New Order

Mi concepción como jugador tuvo lugar en el castillo de Wolfenstein, y mi matrona fue el agente Blazkowicz. Cuando llegó a mí este año tenía grandes esperanzas de que fuera el verdadero juego de disparos de los de toda la vida, como Alexpasc me adelantó medio año antes de que saliera, y así fue. Me lo pulí casi de una sentada, y paladeé cada momento como si fuera el último, porque sabía que hasta dentro de muchos meses no iba a poder disfrutarlo nuevamente. La acción es desenfrenada, el arsenal es necesariamente caprichoso, el ánimo de juego es loco como yo y Max Hass ya siempre estará en mi corazón.

 

 

2. Alien: Isolation

Cómo me cuestas, jodío. Alien es una de mis películas favoritas. La ambientación, esa relación entre los personajes, cómo comparten el terror y cómo se resuelve cada muerte... No nací en los 70, pero siento una nostalgia muy intensa cuando la veo, y me he tirado años esperando un título que le hiciera justicia. El alien es imprevisible, y eso dificulta la experiencia de juego, pero no la experiencia vital, y en mi caso roza lo insoportable, por el suspense que llega a generar dentro de mi habitación en ocasiones. Solo de pensar en ponerme a jugar me entra el terror del alumno ante un examen oral, y eso va a asegurar que se mantenga instalado en mi sistema por mucho tiempo.

 

 

1. Far Cry 4

Adoro los juegos de tiros. A estas alturas del partido ya deberíais saberlo. Y Far Cry 4 es todo lo que busco en el género: tiene armas, acción, aventura, disparates, vehículos, emoción… Las sensaciones que nacieron en Far Cry 3 han madurado para mí en esta cuarta entrega y, si bien no se justifican tan bien como en el tercero, Far Cry 4 me ha abierto las puertas de un Kyrat que no me cansaré de explorar en los meses venideros. Además, tiene monos.


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