Analisis Wii Party U ,WIIU

Es curioso como, Nintendo con Wii U, se ha empeñado en demostrar que su nueva consola de sobremesa es capaz de ponerse a la altura del juego hardcore. Tenemos pendiente un Bayonetta 2 que no es para nada un juego casual. También hemos podido ver un Assassin’s Creed III, un Deus Ex: Human Evolution Director’s Cut o un Batman Arkham City. Con un catálogo así podemos dejar de ver a Nintendo como una compañía risueña y despejar la imagen de que sólo se ocupa de hacer juegos para jugar en grupo y arrancarnos una carcajada.

No obstante hay que reconocer que nos lo pasamos teta cuando la compañía nipona se pone manos a la obra. Con Wii tuvimos títulos como Wii Sports, Wii Party, Mario Party, pero ahora le toca a la nueva plataforma demostrar que puede echar toda la carne en el asador. Empezamos con un Nintendo Land que trajo varios juegos para disfrutar tanto solos como con nuestros amigos. El objetivo entonces no era otro que mostrar la novedad que demostraba, a nivel jugable, la nueva consola. Sí, estoy hablando del nuevo GamePad. Quizá, al principio este mando fue lo primero que nos llamó la atención de Wii U. Así que nos encontramos con un montón de minijuegos en los que este dispositivo era el protagonista.

Y llegando a este Wii Party U, nos descubrimos haciendo el canelo por el salón, entre mesas de Ikea y sofás de Carrefour. Vamos probando varias actividades y es entonces cuando nos damos cuenta de que no se tratan, en su muchos casos, de juegos sencillos en los que mover el WiiMote sin ton ni son. Cuentan con un contenido estratégico, un camino de aprendizaje por el cuál entendemos la mecánica. Eso es lo que nos muestra la Carrera safari, donde comprender las fortalezas y debilidades de cada animal puede hacer que cualquiera gane. Otro ejemplo es el minijuego del Cosmococos, una especie de Pac-man en el que, según el camino que elijamos, podremos coger más píldoras que los contrarios. Y esa es la filosofía de muchos de estas pruebas. Dedícalás tiempo y aprenderás que cada uno puede desarrollar su forma de jugar y ganar como el mejor.

Navegando un poco por los distingos grupos de juegos, lo cierto es que nos cuesta un poco entender su distribución. Quizá es que, una vez metidos en faena, todas las alternativas nos parecen lícitas de jugar en grupo o en solitario contra la IA. Realmente, como más lo disfrutamos es juntándonos y riéndonos unos de otros mientras danzamos y nos picamos entre nosotros. Deberíais habernos visto a Gracia y a mí corriendo por mi salón, desde la pared a la tele llenando vasijas de agua con el WiiMote y tratando que no se nos cayese por el camino con la agitación. ¡Vaya dos patos mareados!

¿Cuál es el problema de Wii Party U? Simplemente que, aunque todos los juegos son divertidos, espero que en casa tengáis un WiiMote por persona porque la gran mayoría de los juegos lo piden. Sí, claro que el Wii U GamePad tiene su lugar pero, si bien hay momentos en los que nos bastará con tener los mandos de Wii, pocos serán los casos en que nos baste con el de Wii U. Un flaco favor a una consola que presentó el cambio de su mando como seña de identidad de la consola. Pensaréis que exagero pero, Alejandro, Gracia y yo, no podíamos jugar a la vez teniendo dos WiiMote y el Gamepad.

Pasada la pena volvamos a los jugos. Es de suponer que muchos os preguntáis para qué narices vale el Gamepad. Haya paz y sosiego, porque hay todo un menú de juegos con este periférico. Juegos como futbolín, juegos de memoria y, mi preferido, Tableros interactivos. Son los típicos juegos de habilidad que siempre tienen su gracia.

Hay algún juego que podría haber ganado con unas sencillas modificaciones. Tenemos el llamado Restaurante Mii, en el que los contrincantes nos van pidiendo comida y bebida y, tras tomarles nota, debemos colocar de memoria cada plato en su bandeja correspondiente. Ahí podría haberse establecido un sistema por turnos, en el que cada uno marcase sus preferencias en la pantalla táctil y luego pudiera comprobarse el resultado. Pero, sin ánimo de ser tiquismiquis, cada alternativa tiene su aquel. En general hay varios juegos en los que demostrar que tenemos una memoria privilegiada.

Cuando os juntéis un grupo de cuatro, no podéis dejar de echar una partida al Supermaratón, que es como el Juego de la Oca o un Party en el que tenemos una prueba por ronda y un sistema de reglas que hace imposible jugar solo una vez. Eso sí, tened en cuenta que el factor suerte de los dados estará ahí para hacernos la puñeta.

Como veis, salvo el asunto de los mandos que se soluciona haciendo a cada uno traer los suyos, Wii Party U logra su objetivo. Además, al comprar el juego, tenemos un pack con un WiiMote Que unos sujetos como nosotros se tiren hasta las 6 de la mañana a carcajada limpia viendo como el de al lado la pifia y se pica tratando de ganarnos. Además tenemos a Paco y Patricia Party presentándonos en cada prueba. En serio, ¿qué les pasa en la boca, hablan algo así como Portugruso? Si tenéis una Wii U y os falta ese juego para montarla en casa con gente o el Nintendo Land ya se os ha quedado pequeño. Wii Party U es una buena opción.