Analisis The Amazing Spider-Man ,PC,PS3,X360

Al nuevo juego de The Amazing Spider-Man le ocurre lo mismo que a la película a la que va ligado: es un buen juego, pero no consigue que dejemos de pensar si preferimos los antiguos o si merecía la pena una nueva versión del arácnido. Y al igual que la película tiene un tono algo oscuro y realista que parece querer acercarla al Batman de Christopher Nolan, el juego intenta parecerse a Batman: Arkham City, pero a pesar de su evidente intento le falta mucho para estar al nivel del murciélago. Es un buen juego con destellos de mucha calidad, pero no es un gran juego.

 

Es un acierto que no narre en paralelo la acción de la película, sino que es una especie de secuela, pero una de esas que salen directamente en DVD: sin las voces ni la caracterización de los actores de la película y con una historia alocada que sin duda obviarán para la auténtica secuela cinematográfica. Sin entrar en muchos detalles para no spoilear el asunto, sólo hace falta decir que los enemigos que nos encontramos más allá del ocasional ladrón/atracador son mutantes medio humanos medio animales y robots asesinos de diversas formas y tamaños con poco interés por los edificios de Manhattan o sus ciudadanos, que no pegan ni remotamente con el realismo que impera en el film.

 

 

El principal problema es que al estar basado en el universo de la película, el plantel de personajes se reduce a los asociados con el propio Spider-Man, y los únicos supervillanos que aparecen son los que no van a sacar ni locos en una peli: con decir que el más conocido es el Escorpión está todo dicho. La historia está bastante bien traída excepto por algunos detalles que huelen un poco, tipo el robot gusano gigante que va taladrando toda la ciudad para capturar al poder Parker, pero por lo demás es bastante coherente e incluso se atreven con algún momentillo dramático.

 

Como jefes tenemos algunos supervillanos del cómic que están basados en animales pero en versión mutante, que resultan bastante sosos, y unos robots gigantes que son los que le dan la gracia al asunto. Hay momentos que uno no sabe si está jugando a Spider-Man o al Modern Warfare 3 porque las peleas con los robots y la destrucción son bastante espectaculares... lástima que al final todo se resuelvan con esquiva+tira una red+quick time event, una fórmula de la que se abusa tanto últimamente que cansa. Al final resultan más difíciles los combates contra varios enemigos cualquiera que los jefes, y los combates... ¡oh! Ahí sí que se parece esto a Batman, sólo que en una versión con peor cámara y más limitada. Aunque le concedo que no disfrutaba tanto del sonido de la violencia desde el Cerebral Bore de Turok 2.

 

La ciudad parece un poco inerte, está muy vacía, pero si juegas a un juego de Spider-Man y te dedicas a ir corriendo por la calle es que no te has enterado mucho de qué va el rollo. Ir de lado a lado simplemente balanceándose puede que empiece a perder emoción tras tantos años, pero la nueva mecánica web rush hace que moverse por la ciudad pueda ser vistoso, espectacular, y rápido: simplemente apuntas, le das al botón, y el bueno de Spidey se busca la manera más espectacular posible de llegar a donde tú le has mandado con unas animaciones muy bien logradas (no se puede decir lo mismo del resto de personajes del juego) que hacen que desplazarse de un punto a otro de la ciudad vuelva a ser tan molón como el primer día.

 

 

Lo que sí tiene la ciudad son muchas misiones secundarias, aunque no sean originales: que si lleva a este tipo herido al hospital, que si detén este robo, que si haz fotos, que si echa una carrera... las mismas que cuando hace unos 10 años jugaba al Spider-Man dos en la Game Cube, vaya. También hay extras, principalmente en forma de páginas de cómic, que están presentes literalmente en todas partes hasta el punto de que se hace tedioso cogerlas; te cruzas con una y pasas de desviarte de donde ibas por ella, porque está todo plagado y al final tienes que elegir si jugar o coger tebeos para desbloquear los extras de leerlos incómodamente en la tele. Luego ya tenemos lo típico: audio-evidencias de lo malos que son los malos, arte conceptual, modelos 3D de los personajes del juego presentados de manera descaradamente parecida a los de los juegos de Batman... ¡y es que hasta los menús se parecen! Y como debe ser en esta clase de juegos, también podemos desbloquear trajecitos basados en los tebeos para darle un poco de variedad al asunto.

 

Si los Arkhams se han convertido en el espejo donde mirarse para los juegos de superhéroes y el rasero por el que vamos a medirlos, hay que decir que este Amazing Spider-Man es un muy digno intento, que no llega pero que no se avergüenza de intentar parecerse ni esconde sus influencias, pero que se ve lastrado por las limitaciones de no estar basado en el universo Marvel de los cómics y padece de una falta de carisma generalizada. En serio, ¿qué emoción tiene enfrentarse a La Higuana, Alimaña, o robots completamente genéricos y repetitivos? Pues no mucha, pero balancearse entre los rascacielos de Manhattan en mallas nunca se queda anticuado.

 

Autor | Roberto Argee

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