Analisis Super Smash Bros. for U ,WIIU

El cuarto Super Smash Bros. ya está aquí. Esto es algo que ya podíamos decir hace dos meses con Super Smash Bros. for 3DS, pero ahora llega 'el de verdad'. Ahora desde luego que no vamos a ponernos a desmerecer la versión portátil del juego, y más aún al ver que después de más de 150 horas de Smash para llevar, Super Smash Bros. for Wii U sabe menos a sorpresa, pero esta es la versión que de verdad pretende representar el espíritu de Smash, aunque las principales carencias en comparación con otras entregas, se notan.

Se nota la ausencia de un Modo Aventura como el de Melee, algo tan espectacular como el Emisario Subespacial de Brawl o incluso un modo tan dinámico como el Smashventura de 3DS, aquello se sentía como aprovechar de verdad todo lo que se podía hacer con la mecánica de Smash y con su concepto de crossover definitivo, con todo tipo de personajes recorriendo todo tipo de mundos de Nintendo enfrentándose a enemigos clásicos. Se nota su falta, y no lo compensa la mini Smashventura que es la Master Fortress a la que llegamos al superar la Senda del Guerrero en el máximo nivel de dificultad, ni muchísimo menos lo compensa el modo MundoSmash, que si bien es más entretenido de lo que puede parecer un juego de tablero fuera de lugar, está lejos de lo que podríamos esperar de Smash.

La parte buena en cuanto a modos de juego se refiere es que vuelven los Eventos (y los Eventos en cooperativo), originales pruebas en las que cumplir un objetivo concreto para superarlo, y teniendo todos ellos objetivos secundarios para conseguir extras. Estas pruebas tienen un gran significado dentro del crossover ya que nos ponen en situaciones como un Mario y Luigi vs Bowser y Bowsy, cuatro Links como si de Four Swords se tratase, o una pelea nostálgica contra los ocho integrantes originales del primer Super Smash Bros. de Nintendo 64.

Por lo demás, más allá de Smash, la Senda del Guerrero (el Clásico, renovado y recortado) o el Leyendas de la Lucha (antiguo All Star), los modos de juego vienen tan escasos como en Nintendo 3DS, y esa es la diferencia principal. Para el producto 'menor' que tendría que ser la versión portátil, hay una abundancia de modos de juego, pero para la supuesta experiencia completa que debería ser esta versión de sobremesa, Bomba Smash, Home-Run Contest, los Asaltos y el Cazatesoros se antojan un tanto escasos, y los retos Master Hand y Crazy Hand son desafíos concretos y apuestas de supervivencia que no dejan de ser una vuelta de tuerca al modo Clásico. ¿Dónde están los minijuegos de carrera o las dianas? Quizá sea la fea comparativa o quizá sea la falta de sorpresa de venir de 3DS, pero estábamos acostumbrados a tener más, y en esta entrega, salvo en número de personajes, trofeos y temas de la banda sonora, las cuentas salen a menos.

Con tal cantidad de contenido y el trabajo invertido en el juego es imposible decir que sea una entrega conformista, pero no deja de dar la sensación de que Smash 4 sólo quiere ser más y mejor que Brawl, mientras que éste, aunque competitivamente haya salido rana, buscaba ser un nuevo punto de inflexión para la saga con innumerables novedades que llegaron para quedarse, como los Ayudantes o los Smash Final. Pero claro, en contenido y nivel de detalle le pasa la mano por la cara a todo Smash que hayamos podido jugar nunca, y en cuanto a calidad del combate en sí, se come a Brawl, claro.

Todo lo que pudimos haber dicho sobre la plantilla de personajes en Super Smash Bros. for 3DS se mantiene aquí al 100%, pero en cuanto a escenarios se refiere, la cosa ha cambiado mucho. Aquí no hay problemas de tamaño ni limitación alguna. De hecho, hay algún escenario excesivamente grande dedicado a combates para 8 jugadores con un tipo de estrategia a seguir muy diferente, y es innegable que puede llegar a ser muy divertido, incluso aunque predominen los personajes controlados por la CPU o jugadores con la IA de un amiibo.

Super Smash Bros. for Wii U pretende ofrecer una diversión muy directa, lanzarte a combatir sin preocuparte por mucho más, y así serán sólo los más completistas quienes busquen completar todos los retos aprovechando todos los modos de juego con todos los personajes y buscando alcanzar locuras como terminar el All-Star en difícil con los 51 personajes (48 + 3 Mii) o aguantar un minuto con Luigi en el Smash Intrépido (Cruel Melee), ya que por lo demás, el juego ofrece tanto contenido desbloqueado que lo más sencillo es jugar un combate tras otro, sin complicaciones.

Al menos Super Smash Bros. for Wii U nos permite jugar como se tiene que jugar a Smash, y de hecho y por alguna extraña razón, el juego sigue pareciendo completamente hecho para ser jugado con el mando de GameCube. Los botones de escudo y agarre del control con Wii U GamePad o Controller Pro están invertidos, y aunque se puede configurar completamente todo el control para cada mando y asociar la configuración a un nombre para utilizar en cada combate, es extraño que en MundoSmash no se permita escoger nombre/configuración, con lo que si no hay mando de GameCube, el control estará invertido, como viene de serie.

A pesar de que parezca que haya un tono negativo en estas palabras, no lo hay en absoluto. Se esperaba más, es una pena que la versión de 3DS haya lastrado tantísimo a la versión de Wii U, y como en todo, puede haber problemas, hay que decirlo todo. Pero Super Smash Bros. for Wii U sigue siendo amor puro por la historia del videojuego, siguen siendo trofeos y temazos que hacen saltar la lagrimita de la nostalgia, sigue siendo un elenco de personajes cuidado hasta el mínimo detalle y escenarios increíbles, sigue siendo un juego afable como party game y profundo hasta lo más hardcore de la escena competitiva, y todo 'en gloriosa (y esperadísima) HD'.

[ACLARACIÓN] El análisis de Super Smash Bros. for Wii U está incompleto, y como tal, por el momento, la puntuación corresponde al análisis de Super Smash Bros. for 3DS. He podido jugar mucho y explorar por completo todo lo que ofrece el juego en sus modos offline, pero hasta el lanzamiento del juego no será posible comprobar cómo funcionará online, algo que, esta vez sí, será fundamental para juzgar la experiencia. También, y aunque anteriormente ya he podido probar numerosas veces las funcionalidades de amiibo y el control de GameCube, lo he hecho en versiones no finales del juego, y para la ocasión sólo contamos con la copia final del juego, ni amiibo ni adaptador de GameCube. El análisis será actualizado con todo lo correspondiente cuando se pueda valorar con propiedad.