1. Mundogamers
  2. Analisis
  3. DS

Analisis Inazuma Eleven 2 DS

Lunes 26 de Marzo de 2012 por Toni Piedrabuena
Inazuma Eleven 2 es uno de esos superlativos últimos coletazos que da una consola antes de pasar a un segundo plano en el mercado. Uno de esos momentos de lucidez antes de la despedida de un sistema como el de Nintendo DS, que tantos años de diversión nos ha dado desde el ya lejano año 2004. Eso sí, no se engañen: el vástago de Level 5, lejos de ser una promesa, es una franquicia asentada en las mieles del éxito, con un paso por Japón de éxito tras éxito y una mercadotecnia en forma de cómics, anime, películas y merchandise que no hace más que confirmar mi afirmación. Con casi tres años de retraso, pero con un trabajo de adaptación a nuestro idioma ejemplar, llega Inazuma Eleven 2: Tormenta de Fuego y Ventisca Eterna, dos cartuchos gemelos con sutiles diferencias que harán las delicias de cualquier seguidor de las aventuras del Raimon, tenga la edad que tenga, que eso también es meritorio.

Level 5 firma éxito tras éxito en su paso por Nintendo DS. Dos de las franquicias best seller de la portátil de dos pantallas están desarrolladas por el estudio nipón: Doctor Layton e Inazuma serán dos series que en el futuro, sin duda, conformarán la foto de familia de lo que fue la millonaria máquina de Nintendo. Todavía quedan aventuras por ver de los futbolistas en nuestro país, pero la primera entrega fue un auténtico éxito de crítica y venta, aunado, sin duda, por la popular serie de animación que lleva emitiéndose en Boing desde hace unos años. El poder de Inazuma, lejos de quedarse en el público infantil, ha conseguido engatusar a muchos adultos que buscan, nostálgicos, un heredero legítimo para el hueco balompédico que dejó Oliver y Benji hace muchos años, e Inazuma ahí tiene mucho por lo que luchar.

Los jugadores más avispados y otakus conocerán las grandes obras que desarrolló Tecmo en Famicom y Super Famicom en los ochenta y los noventa con Oliver Atom como protagonista. Los que nos hemos atrevido a hincarle el diente y disfrutar de esos títulos (con un soberbio uso del Tecmo Theater, por cierto) hemos sabido ver mucho más en Inazuma Eleven: un regalo para los sentidos para los que esperábamos un digno sucesor. Level 5 no tiene problema alguno en homenajear esos títulos y reconvertirlos a obras dignas para el público actual. Es por ello que quiero recomendar lo que hoy reseñamos a esos locos que nos atrevimos con los kanjis y la memorización loca de opciones para poder llevar a cabo gestas imposibles con Tsubasa y compañía: caballeros, damas, deben conocer Inazuma, se lo garantizo.

¿Y los que no se unen en ese pequeño y selecto círculo? También debéis darle un tiento. Hablamos de un RPG futbolístico completo, largo y con una rejugabilidad exquisita. La historia nos llevará a competir contra la Academia Alius, una amenaza llegada del espacio exterior que pretende aniquilar a todos los institutos japoneses que practiquen el deporte rey. Sí, probablemente el ataque alienígena más surrealista que hayamos visto en la dilatada historia del cine, libros y juegos sobre extraterrestres. Dicha amenaza provocará marchas dolorosas en el Raymond y fichajes nuevos necesarios para estar a la altura de la galáctica aventura. A lo largo de las más de 15 horas de historia conoceremos docenas de enemigos, centenares de nuevos amigos y una narración donde la superación personal es la premisa más clara y recurrente. Los partidos, el protagonista absoluto de la jugabilidad propuesta por Level 5, se desarrollan de forma exclusiva en la pantalla táctil de Nintendo DS. Organizamos nuestro once, banquillo y saltamos al campo para controlar con el stylus cualquier movimiento o acción que hagan nuestros futbolistas. Debemos trazar líneas para que recorran lo marcado y ejecutar estrategias de ataque y defensa según controlemos o no el esférico. Para ello, dispondremos de habilidades especiales que agotarán nuestra energía a cambio de acciones espectaculares que se traducen en éxitos más que probables. Gestionar nuestro cansancio y técnicas es vital para salir victorioso en cualquier partido de Inazuma Eleven.

Y una vez acabada la historia, ¿qué nos queda? Docenas de deportistas a los que fichar para nuestro escuadrón y multitud de retos en los que competir para obtener items especiales. Mucho más interesante y amplio que en la anterior edición, por cierto. La dificultad de todo el juegos es relativamente fácil, pero no tanto como el primero, que era un auténtico paseo. Las posibilidades de intercambio de futbolistas y de partidos contra otros jugadores también es un excelente pasatiempo que no debéis pasar por alto. Intenta, además, sacar partido de usuarios que tengan la versión opuesta a la tuya para negociar y sacar rendimiento a cada edición: no os arrepentiréis. Que no se me olvide hablaros del apartado sonoro: ¡qué estupendas melodías! ¡qué gran doblaje al castellano! Muchos podrían aprender, desde luego, del buen hacer de Nintendo cuando se trata de traducir al castellano sus obras.

Imaginad, claro, que toda la estética imprimida en el cartucho es nipona 100%, y que los disparos de fuego, hielo y de lo que a usted le plazca, caballero, son una auténtica locura imposible que agradará a muchos y disgustará a otros. A mí, que soy un tipo facilón, me vuelve loco, no os voy a engañar. Muchos vídeos ayudarán a la narración a ser más clara, algunos de ellos de una calidad estupenda, con una animación genial que no tiene nada que envidiar a su homólogo animado en televisión. Las acciones especiales y lances del partido son poligonales, el resto del juego combina personajes en dos dimensiones en entornos tridimensionales con gran diseño y gusto.

Bien, es difícil encontrar pegas a un producto como el que tengo entre las manos. Francamente, ni se me ocurre qué pensar en negativo sobre él. Pocas veces tienes la oportunidad de disfrutar de títulos tan satisfactorios y brillantes en su terreno. Una propuesta fresca, divertida y funcional que gustará a grandes y pequeños; un mimo por la narración esplendido; horas y horas de retos y extras... ¿Por qué mancharlo con mermas que, desde luego, no están a la altura de sus indiscutibles virtudes? Me habría gustado gustarlo en japonés y que hubiera sido más duro en la dificultad, ¿pero acaso enturbia eso en algunas décimas? Son cosas triviales. Inazuma Eleven no se ha convertido en un fenómeno de masas por casualidad, lo ha hecho por propio merito y trabajo de sus creadores, que merecen mil y un halagos por cada código escrito en el preciado cartucho que hoy atesoramos como una de las piezas más imprescindibles del catálogo de Nintendo DS, que ni es corto ni está falto de calidad. Que siga rugiendo el estadio recordando al Inazuma, que la cosa va a para largo.
9

/ 10


<< Anterior Siguiente >>