INTRODUCCIÓN - Ikaruga -
En ocasiones realmente discernir la línea que separa el mundo radicalmente comercial de esta industria (parafernalia en formato de publicidad, target público, notas de prensa, presentaciones insustanciales, proyectos genéricos y demás aburrida y real burocracia) con su espíritu original. Pierdes la esperanza cuando te das cuenta de que los Reyes magos son los padres y descubres con impotencia que juegas una vez más a lo que siempre has jugado, con un tímido lavado de cara para poder justificar otros 60 (o 70 incluso más) euros con los que continuar engordando las arcas de cuatro magnates del entretenimiento. Comerciantes de humo, vamos.
Treasure es diferente. Sigue siendo una compañía que trabajan para vivir, pero ojala el resto de de estudios (obviando honrosas excepciones, como EAD, Clover, AM2 etc.) tuviesen un nivel minimamente similar de entrega y visión de futuro. Desde principios de los noventa la compañía siempre ha estado en el paradigma de los juegos arcade, con clásicos inolvidables como Guardian Heroes, Radiant Silvergun, Sin & Punishment o este inolvidable Ikaruga para Dreamcast.
Por tan sólo 800 ms. Points (unos 8?) podremos tener en la versión más irrevocablemente perfecta que jamás se ha publicado de Ikaruga. En efecto, Ikaruga HD es una conversión píxel perfect, re-adaptada a la alta definición, ligeramente más fluido (por favor, se exige jugar con arcade stick?) y con opciones impensables para su fecha de publicación (como un más que competente modo co-operativo vía Internet).
¿Hasta donde llega el videojuego? ¿Tras ejemplos como Ikaruga, donde la base es tan irrefutablemente pura, incomparable a otro medio, no deberíamos enfocar la industria por esta dirección? Puede que a vds. les convezcan con apabullantes recreaciones de ciudades fantasmas, o pseudo discursos narrativos de calidad sonrojante. A mi, y espero que a muchos otros, se nos impresiona mediante refinadísimas curvas de dificultad, una obsesiva y artificialmente onírica sensación de control sobre nuestro avatar. Un juego mediante la imagen, ¿Les suena?
GRÁFICOS - Ikaruga (Xbox Live Arcade) -
Primero hay que hacer hincapié en que Ikaruga es un juego de Dreamcast, sobre un género prácticamente petrificado en las 2D, un título a su vez está concienzudamente limitado por sus patrones lineales y que se publica bajo el formato de descargas vía Xbox Live. Todos estos factores no afectan, si no que agravian, el valor de su poderosa imagen convirtiéndose automáticamente en uno de los juegos visualmente más atractivos de la consola por méritos propios.
Ikaruga ya deslumbró en 2001 y sigue haciéndolo casi siete años más tarde. El movimiento elegante de nuestra nave destruye las hordas de enemigos con una sutileza que sirve de contra punto a una generación llena de horrorosos diseños de marines vigoréxicos sujetando monstruosas armas de guerra. Ikaruga tiende al minmalismo, ?maximalismo? más bien si nos fijamos exclusivamente en algunos segmentos del juego donde la cantidad de proyectiles y objetos en pantalla nos harán simplemente perder la noción de la proporción.
La bipolaridad de nuestra nave se convierte en el ying y el yang de todo esta space-ópera de destrucción y supervivencia. Para esquivar proyectiles negros deberemos cambiar el color de nuestra nave (presionando un botón) y de forma viceversa blanco. Esto crea una armonía plástica que juega sabiamente con los contrastes, con un gusto casi pictórico por la composición y la armonía impropias de un videojuego que se nutre de la linealidad y los scripts indispensables de un título de género como este.
Por último, los diseños de menús, enemigos e incluso escenarios, están fuertemente inspirados en la mitología oriental, sin perder nunca el espíritu original de los shumps, con barrocas naves espaciales de dimensiones estratosféricas y brillantes efectos de luz logrados tan sólo mediante la saturación completa de la pantalla con proyectiles. Un espectáculo que perdurará en nuestras retinas no por un enfermizo uso del engine si no por estilo y artesanía. Prácticamente perfecto, los últimos capítulos son sencillamente indescriptibles.
SONIDO - Ikaruga -
El apartado sonoro de Ikaruga no le va a la zaga al visual. Melodías sencillas pero dotadas de una épica muy particular, prevalecen ante las composiciones rimbombante e impersonales de otros juegos. Pese a no estar orquestadas y ser a todas luces composiciones humildes, logran permanecer en nuestra memoria gracias a su potencia y perfecta sincronización con la imagen.
Los FX son también sencillos, ciertas explosiones pueden sonar ahora ?enlatadas? aunque cumplen y no molestan ante la borrachera gráfica. El juego no tiene voces salvo en los menús y momentos muy puntuales, las cuales están digitalizadas mediante vocoder.
Aunque el apartado de sonoro sea discreto en lo técnico (que no en lo puramente estructural, donde resulta ser sobresaliente y muy acorde) utiliza las características de Xbox 360 con maestría, permitiendo sonido digital en 5.1 de gran fidelidad, más pulcro y potente que nunca.