No vamos a entrar en el típico debate de foro de qué Final Fantasy es mejor. Simplemente diremos que a nosotros nos gustan los clásicos (en parte porque ya tenemos una edad), y especialmente Final Fantasy IV. Ahora
este juego original de Súper Nintendo llega a PSP después de haber pasado por PSOne, Game Boy Advance o Wii (entre otros sistemas). Y lo hace con una edición que, como evidencia su nombre, resulta bastante completa. No es que vaya a aportar muchas novedades a los aficionados, pero sigue siendo perfectamente elogiable.
Para los que no lo conozcan, hay que empezar diciendo que Final Fantasy IV fue un juego que marcó un antes y un después dentro de la serie (al margen de que fue la primera entrega de dieciséis bits y no de NES). Aunque continuaba manteniendo el estilo épico y medieval de las tres partes anteriores, ésta ofreció por primera vez un argumento mucho más profundo y complejo.
Incluso a día de hoy su historia atrapa por lo bien narrada que está, con muchos giros inesperados y cuidados personajes. Una historia, insistimos, mucho menos genérica de lo que era -y es- habitual encontrar dentro de los juegos de rol. Pero también sus combates sorprendieron mucho en su momento. Todavía mantenían un estilo aleatorio y por turnos, pero añadiendo innovadoras barras de tiempo que limitaban tus acciones.
Ambas cosas se han incluido tal cual en esta edición -argumento y combates-, además de todo el desarrollo en sí mismo, claro. O lo que es lo mismo: diferentes lugares que visitar (castillos, pueblos, mazmorras), personajes con los que hablar, etc. Todo lo típico dentro del género, aunque muy bien llevado. Lo que sí ha cambiado ha sido el aspecto visual.
Este Final Fantasy IV no es una de las versiones anteriores rescatada para PSP, sino que el apartado gráfico se ha adaptado íntegramente a la portátil. Que nadie se lleve las manos a la cabeza (en especial los más puristas), el juego mantiene su aspecto retro, clásico, de dieciséis bits, pero más nítido y atractivo que hasta ahora. Sólo hace falta echar un ojo a las capturas para darse cuenta.
Todo lo contrario sucede con el idioma, que sí obliga a dar un tirón de orejas para los responsables.
¿Cómo es posible que la versión de Game Boy Advance de este juego estuviera en castellano y ésta no? Bueno, posible sí es, claro, pero también un tanto molesto. Los usuarios que no entiendan muy bien el idioma, se van a quedar sin poder descubrir todos los secretos de la interesante trama. Pero también dejaremos este repetido debate para otro momento.
Quitando ese detalle -que no es pequeño, precisamente-, la edición es prácticamente perfecta. Además del clásico Final Fantasy IV, el UMD incluye también The Afteryears, una continuación directísima del original que vio la luz para móviles únicamente en Japón hace unos años (posteriormente llegaría a WiiWare). Se trata de una entrega que continúa fielmente tanto la historia como la jugabilidad del primero, aunque sumando ligeras novedades, como la posibilidad de realizar ataques conjuntos.
Pero pese a ser un juego moderno, es idéntico a su antecesor; vamos, que no encontrarás apenas diferencias entre uno y otro, ni siquiera visuales. Por último, The Complete Collection incluye un añadido más, casi más un extra que otro juego como tal, llamado Interlude. Como su propio nombre indica, es
una aventura -mucho más corta y sencilla-, que une argumentalmente los dos títulos anteriores, Final Fantasy IV y The Afteryears. Resulta interesante, sobre todo teniendo en cuenta que, en conjunto, tendrás título para rato.
Estamos hablando, por lo tanto, de una edición sobresaliente a todos los niveles (que además incluye jugosos extras) y que sólo flaquea por el hecho de estar en inglés. Si exceptúas esto (o, mejor dicho, si hablas inglés),
es un producto muy atractivo que hace honor a una de las entregas más destacables de esta veterana saga, al menos si hablamos de sus primeros tiempos. Si te gusta el rol clásico, éste lo es con mayúsculas.
NOTA FINAL: 8
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