1. Mundogamers
  2. Analisis
  3. 3DS

Analisis Yoshi's New Island ,3DS

Mucho más que una estética bonita.
Lunes 22 de Junio de 2015 por Víctor Junquera

1995. Después de que Nintendo revolucionase los plataformas con Super Mario World y Yoshi se convirtiese en mucho más que un power-up del fontanero, llegaba a Super Nintendo otra auténtica revolución. Otro formato de plataformas, con un estilo visual nunca visto hasta entonces, originalidad y simpatía a raudales dentro de un juego largo, profundo y con interesantes mecánicas bien explotadas como el lanzamiento de huevos bien definido (colores, rebotes) o las transformaciones de Yoshi. A pesar de llevar el sobrenombre de Super Mario World 2, Yoshi's Island triunfó por méritos propios y tocó techo en un título único, no había posibilidad de decir «estaría bien añadir esto o esto otro para la segunda parte», porque no había nada que añadir salvo darle a cada color de Yoshi una habilidad concreta.

 

Un estilo artístico mono, cute, como hecho con el Art Academy.

 

Después de un Yoshi's Story en Nintendo 64 y un Yoshi's Island DS que no cuajaron porque no aportaban nada interesante y no eran ni tan sorprendentes ni tan redondos como el original, pasan los años y el miedo al regreso de Yoshi en solitario es comprensible, precisamente porque el original sigue siendo intachable y, a día de hoy, poco habría que añadir. Pero precisamente el 'New' de Yoshi's New Island deja ver su propósito de no tocar prácticamente nada de lo que hizo grande al original para que hoy en día pueda ser disfrutada una fórmula clásica, pero para quienes ya estábamos ahí en 1995 o incluso en 2002 con su port a Game Boy Advance, Yoshi's New Island no tiene nada de 'New'.

 

Hay quien lo llamará homenaje y hay quien lo llamará vagancia, pero todo en Yoshi's New Island huele a viejo, a usado. Prácticamente todos los enemigos, aliados y elementos del juego son los mismos que en Yoshi's Island y cumplen exactamente la misma función. Los tocones giratorios, Poochy, las gaviotas, los telesilla, los Shy Guy en zancos, las poleas, los monos y sus pepitas de sandía, las rocas o bolas de nieve, Kamek,... Hasta el lagrimón del Chain Chomp gigante que nos persigue al morder piedra. Y ya puestos, es una pena que no hayan decidido reciclar también los jefes finales, mucho menos inspirados y más fáciles que en el original, o las transformaciones de Yoshi, no integradas en el desarrollo de cada pantalla, lentas y poco precisas y que además obligan a utilizar controles giroscópicos no muy bien implementados.

 

Tras un nivel no accedemos a la fase bonus de rascar o emparejar, sino que el premio es conseguir medallas, al azar, para llenar un medidor que desbloquea un nivel extra. Una trampa para buscar rejugabilidad de niveles que no queda bien.

 

De los intentos más recientes de Nintendo de volver a su época de Super NES con ese aspecto jugable tan clásico y que no envejece como en Zelda: A Link Between Worlds o en Donkey Kong Country Returns, este de Yoshi's New Island ha sido el más desacertado, y no porque haya envejecido mal o no, sino porque las novedades empeoran una experiencia a la que no es tan fácil acostumbrarse. Yoshi's New Island es un plataformas más pausado, en el que explorar cada rincón de cada nivel, y los niveles largos con cortes de ritmo (las transformaciones) y determinados puntos de no retorno no hacen una buena combinación para hacerlo rejugable y querer conseguir todas las estrellas, monedas rojas y flores de cada fase o pasar por un proceso aleatorio al final de cada nivel varias veces para desbloquear fases secretas.

 

Incluso siendo más fácil que la mayoría de plataformas, incluye su propia superguía que debería facilitar un nivel tras varias muertes en el mismo punto, pero este arreglo de las alas que hacen las veces de superguía no supone tanto beneficio ya que sólo conceden un revoloteo horizontal. Ilimitado, sí, pero que de poco sirve cuando los únicos niveles que se complican avanzan en diagonal.

 

Los huevos gigantes son la gran novedad y son tan poco útiles como los champiñones gigantes de los New Mario. Los huevos metálicos dan más juego, pero ambos están desaprovechados.

 

En general Yoshi's New Island da una impresión de poco esfuerzo, de que de verdad esta vez se han dejado arrastrar por la idea de que sólo la nostalgia o un estilo diferente pueden vender lo suficiente, y esta vez se han equivocado al no haber sabido acompañarlo correctamente de unas novedades interesantes o una buena y variada banda sonora que tanta falta le hace. Y con todo, no resulta un mal juego, no es ni mucho menos desastroso, pero sencillamente busca ofrecer como algo nuevo lo que muchos tuvimos hace casi veinte años. Por eso, no es para nosotros.

6.5

/ 10


<< Anterior Siguiente >>