Analisis The Walking Dead ,PC,PS3,X360

Telltale ha encontrado su piedra filosofal: agarrar todas las licencias que pueda y que remuevan el sentimiento, nostálgico o no, del usuario. Siempre hemos seguido a este estudio con una filosofía y tesón sin igual por mantener despierta la aventura gráfica. Sam y Max fue una gran demostración de intenciones, pero en plena madurez del estudio, tras el buen hacer de Regreso al Futuro, pero el traspiés de Parque Jurásico, The Walking Dead parece encontrar el camino adecuado y una media bien ponderada de estilo, jugabilidad y franquicia interesante.

 

Aunque siga la estela cartoon, es en The Walking Dead donde mejor sienta el estilo característico de Telltale, quizá por centrarse en el cómic más que en la serie, y mezclarlo todo con sangre y vísceras. A ello le sumamos una mezcla interesante entre cinemática y jugabilidad, que desbordaba por cada costado Jurassic Park y Regreso al Futuro respectivamente.

 

 

Por fin nos movemos sin perder el point and click tan clásico adaptado a los nuevos tiempos, y quizá centrado más en el mando de consola que en el teclado y ratón. Pero lo importante de The Walking Dead no es cómo se juega, sino lo que se siente mientras juega. De todas las declaraciones que el estudio hizo sobre su acercamiento a un tipo de aventura madura, con decisiones importantes que cambian el devenir de los acontecimientos, guiñando un ojo a Heavy Rain por el camino, es este The Walking Dead el que mejor hace gala a la hora de involucrar al jugador en la trama.

 

Cinco decisiones marcan cinco puntos de inflexión en el capítulo, normalmente, obligándonos a decidir en cuestión de pocos segundos a quién salvamos y a quién no. Sin duda, el universo Walking Dead es perfecto para estos accidentes morales, donde no hay tiempo para emitir un juicio justo. Se trata de sobrevivir, y de quién es más importante para ti en el grupo. No hay tiempo para más, en un alarde crueldad que hace sonrojar a las duras decisiones del primer Mass Effect.

 

Walking Dead es esto, y poco más, porque su primer capítulo, de los cinco que componen la aventura y que ser irán sucediendo mensualmente, apenas posee una hora y media de duración. Pero en ese escaso tiempo hemos podido sufrir y estar en tensión a través de una aventura gráfica, algo que pocas veces hemos visto en un videojuego. Telltale lo logra alternando escenas de calma y horror; permitiéndonos conocer a los personajes, que nos gusten, para arrebatárnoslos de un plumazo y mordedura zombi.

 

En el camino, también nos encontraremos con personajes del mundo del comic, como Hershel, Lilly y Glenn, en un ademán inteligente que nos permite disfrutar de ellos sin repetir trama. Los nuevos también están muy logrados, obligándonos siempre a escoger lado, nada de mantenerse neutro en este mundo de caos, y llegando a hacernos pensar sobre la vida y sobre la muerte, sobre la familia y sobre la culpa; en un constante vaivén de escenarios y situaciones tranquilas, desesperadas, sigilosas y entrañables.

 

The Walking Dead es, posiblemente, la mejor obra de Telltale hasta la fecha, a no ser que sientas debilidad por alguna de sus otras licencias. Es corta, pero se paga por todos los capítulos, aunque no todo el mundo estará de acuerdo con su filosofía episódica que te hace esperar y morderte las uñas más que un nuevo capítulo de Mad Men (no nos atrevemos a decir de la serie homónima, por no herir sensibilidades). Y es que nunca un juego de zombis con tan poco tiro y tan poca acción pasillera ha calado tan fuerte sobre nuestros mandos y ratones. Para algunos será una pérdida de tiempo y de gatillo fácil. Para otros, es una buena noticia.

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