1. Mundogamers
  2. Analisis
  3. X360

Analisis Halo 4 ,X360

El legado de Bungie está en buenas manos
Jueves 01 de Noviembre de 2012 por Toni Piedrabuena

Halo 4 deja de ser un juego innecesario en el momento que comienza a dar vueltas dentro de tu Xbox 360. Todos vimos con recelo el cambio de manos de la franquicia entre Bungie, padres creadores del mito, y 343 Industries, esos padres adoptivos que nadie sabía cómo tomarían al niño desamparado. Tras finalizar una nueva batalla en la piel del Jefe Maestro y disfrutar del nuevo y excelso online propuesto por la desarrolladora washingtoniana, puedo confirmaros que me equivoqué con mi escasamente fundamentado veredicto en el momento en que se anunció el juego en el E3 de 2011, como muchos. Así que ya saben: pónganse cómodos que comienza la trilogía del reclamador.

 

No os voy a contar nada de la historia narrada en la presente entrega, pero sí os puedo decir sin miedo al spoiler que la trama gira en torno a la relación del bueno de John con Cortana, y tendremos momentos auténticamente brillantes durante el transcurso de la narración. Aunque hemos visto y vivido esa relación en las entregas anteriores, nunca hemos sido partícipes de un trato tan humano entre el humano detrás de la armadura y su inseparable IA. Me gustaría contaros más, pero me temo que me voy a reservar para que lo gocéis vosotros en la intimidad de vuestras casas. Por lo demás, la aventura cobra tintes homéricos en lo que es una auténtica odisea espacial de incierto destino y terribles pruebas. El encontronazo con uno de los pilares fundamentales de la mitología Halo nos dejará con la boca abierta y dará el pistoletazo de salida a una nueva guerra.

 

 

Nos enfrentaremos al covenant con todo lo que ello conlleva, pero el rol protagonista de los enemigos del cuarto capítulo de la franquicia recae sobre los prometeos, unos seres antropomórficos con numerosas habilidades de combate acompañados de unas cuantas nuevas unidades que nos pondrán las cosas difíciles. Además de ser interesante el nuevo comportamiento de los presentes enemigos, también es un placer recibir un amplio abanico de nuevas armas que vienen a complementar a las ya conocidas por la franquicia con nuevas habilidades y usos prometeos. En la historia, de momento, espectacular, veremos en Infinity – el nuevo nombre que recibe el on-line en Halo 4 – qué tal sienta esa variedad y si no nos arrepentiremos de tener alguna que otra nueva adquisición en nuestro arsenal que desequilibre el juego.

 

Precisamente, y sin entrar todavía en el on-line, se recuperan las habilidades de armaduras que conocimos en Reach, y a las que ya conocíamos (jet-pack, camuflaje u holograma) se le suman nuevas habilidades como un centinela automático, un campo regenerativo, un escudo de luz o un nuevo modo de visión que nos permite ver a través de elementos opacos. Digo lo mismo que con las armas: veremos a ver cómo queda la broma y si no tendremos que arrepentirnos de la potencia de algunos de los nuevos añadidos. En los distintos tests on-line que se ha hecho del juego, por lo que parece, lo que más se lleva y tiene todos los números para acabar triunfando es la nueva visión, pero el tiempo dirá qué es más útil al final.

 

La campaña no es tan larga como la de Reach o la tercera entrega, pero tiene momentos muy intensos y se ha jubilado, en gran medida, esos momentos Halo de recorrer distancias grandiosas entre un punto y otro subido a un Warthog sin mayor interés que intentar reventar con nuestro lanzacohetes el vehículo de nuestros compañeros del cooperativo. Deberían dar logros por eso. Aquí supongo que dependerá de lo que penséis vosotros una vez lo terminéis, pero yo creo que Halo 4 tiene menos añadidos sospechosos y es más honesto en su puesta en escena que entregas anteriores, que sin ser la presente franquicia el paradigma de la caradura y la duración artificial, ciertamente, sabe llevar perfectamente los galones de un Halo sin excesivos rellenos innecesarios.

 

De hecho, Bungie tocó un buen asunto con el uso de las calaveras – que nos permitían añadir handicaps al juego al encontrarlas y activarlas – y son muchas las cosas que se pueden hacer con tres amigos en la presente entrega. Os soy sincero: me he quedado con las ganas de poder probar esa experiencia como es debido por culpa de las severas medidas que está tomando Microsoft contra los jugadores que juegan a Halo antes de tiempo – con las que no estoy para nada de acuerdo, si se me permite – pero el que conoce la franquicia sabe ver las buenas cosas de la serie incluso jugando solo, y he podido detectar algunos niveles que van a ser una auténtica delicia al ser acompañados por amigos. Luego hay otras que suponen un auténtico misterio para un servidor el intentar adivinar la ejecución de 343 Industries en ella, pero en caso de que acabasen siendo un disparate no duden en que se lo haré saber a ustedes por todos los medios posibles.

 

 

El doblaje no creo que haya estado a las cotas de excelencia esperables en la presente entrega, y el trato de la voz castellana en el título no parece haber tenido tanto esfuerzo como cabría imaginar en un juego de la presente categoría. Otro asunto es el de la música: impresionante a todas luces y con temas realmente increíbles que llegan a su cenit en los últimos capítulos de la historia. En 343 Industries se han esmerado en dar un lavado de cara al apartado gráfico y ponerlo a una altura en la que nunca se había situado Halo en la presente generación. Sin ser un referente técnico del momento, sí es cierto que la odiosa comparación entre el capítulo que acontece y los anteriores está a otro nivel y fuera de toda duda.

 

La campaña acaba siendo más interesante en niveles difíciles, Heroica y Legendaria, siendo ese el nivel por antonomasia para todo fan consagrado de la serie. Pero más allá del uso de calaveras y la subida de dificultad, 343 Industries ha tenido un detalle interesante con el usuario: las Spartan OPS, un nuevo sistema accesible desde Infinity en el que podremos disfrutar de numerosas misiones extra para jugar en solitario o acompañado. Desde el estudio de Redmond se planea contribuir al usuario con nuevas misiones a lo largo de las próximas semanas, y según se comenta por la red, dicho contenido extra, gratuito, insisto, podría sumar 12 horas más de juego. En la presente modalidad jugaremos con los spartans de Infinity, es decir, los mismos que usaremos en el on-line con sus armaduras y habilidades especiales que podremos escoger desde el menú de juego.

 

Las misiones son variadas y divertidas, seguro que alegrará algunas horas extra a muchos jugadores, y viendo lo bien que han funcionado en otras franquicias de FPS las misiones alternativas, no es extraño que se haya querido imitar ese modelo impuesto por Call of Duty en la presente generación. Hablar de Duty, de hecho, es un buen punto de partida para comenzar a hablar de Infinity: dejando de lado los modos de juego, lo que más sorprende de Halo 4 y sus batallas en línea es el nuevo sistema de puntuación y las nuevas categorías en las que se ha separado las habilidades de nuestro personaje. Según vamos sumando puntos podremos acceder a nuevas mejoras, armas y habilidades que podremos usar durante la partida. En dichas categorías podremos escoger (y desbloquear con puntos que obtendremos tras cada enfrentamiento) qué arma principal y secundaria usar, qué tipo de granada, qué habilidad y qué recompensa recibir en plena partida tras conseguir una puntuación concreta. Sí, definitivamente los de Washington han mirado a la competencia y han tomado una buena idea, ahora toca saber si la comunidad lo acogerá de mejor o peor gana.

 

Dejando ese punto a un lado, de momento positivo, insisto, es en Infinity donde Halo 4 enseña músculo. En mi opinión no ha existido mejor trato e interfaz en la red que la puesta por Bungie en Halo 3 y Reach, y la cuarta parte no se ha querido quedar atrás. Todo va rodado por el momento: estoy absolutamente convencido que cuando el juego se ponga a la venta el próximo 6 de noviembre todo seguirá funcionando igual de bien, por lo que pueden estar contentos caballeros: si la experiencia no se rompe por culpa de alguna nueva arma, habilidad o el sistema de clases, podremos decir que estamos ante uno de los modos online más completos y titánicos de la historia de Xbox 360. Y es grande por muchos motivos: sus modos de juego, evidentemente, y las posibilidades infinitas que ofrece Forge, que vuelve con fuerza.

 

 

Halo no es cualquier cosa en un sistema como Xbox: Halo es Xbox y Xbox es Halo. Halo es el más claro referente de la marca de videojuegos de Microsoft. Es por eso que el reto al que se ha enfrentado 343 Industries con la presente entrega era un ejercicio complicado a todas luces. Los desarrolladores lo han encarado con valentía y elegancia en su primer capítulo importante para la serie con bastantes novedades y un climax en la narración que, seguro, no quedará exento de polémica tras la drástica decisión del equipo. Además, se han permitido el lujo de dejar un escenario envidiable para la más que lógica quinta entrega.

 

En pocas palabras y comparando si me lo permitís: todos tenemos claro que el Jefe Maestro es a Microsoft lo que Mario y Link son a Nintendo o Sonic a Sega, y es por eso que a todos nos costaba  imaginar una nueva aventura en dicho universo sin la presencia total de Bungie. ¿Os imagináis un Mario sin la tutela de Miyamoto y Takashi Tezuka? A mí me cuesta, pero tarde o temprano ocurrirá y esos futuros desarrolladores tendrán un serio problema al que enfrentarse con forma de una alargada sombra de excelencia y buen hacer durante muchos años. 343 Industries, con gente que estuvo involucrada en los anteriores capítulos de la serie, cierto, ha salvado la situación con honores y de forma excelente, por lo que podemos decir sin miedo que el futuro del Jefe Maestro está en buenas manos, y eso no es baladí.

 

Páginas
  • 1
  • 2
  • 3
9
/ 10

<< Anterior Siguiente >>