1. Mundogamers
  2. Analisis
  3. PS3

Analisis Gran Turismo 6 ,PS3

Gran Turismo 6 mira hacia la conducción casual mientras se centra en una mejora gráfica sin saltar a la nueva generación.
Miercoles 22 de Enero de 2014 por Alvaro Ondina

Fue todo un impacto cuando se anunció que Gran Turismo 6 no saltaría a la nueva generación. Y ahí nos encontramos, con unas nuevas consolas ya en el mercado, un Forza Motorstorm 5 en Xbox One y ese GT6 que deja a PS4 algo coja. Hay otros juegos de conducción en esa plataforma pero podríamos tomar como válida la rivalidad entre esos dos grandes títulos. Aunque podemos ver que la opción de Polyphony Digital no ha sido muy equivocada.

 

Puede que Gran Turismo 6 esté pasando ante nosotros sin levantar demasiado revuelo, pero plantea una rectificación de algunos aspectos que su predecesor dejaba algo sueltas. Lo primero que notamos es que esta entrega viene con un menú bañado de sencillez. Atrás quedaron esos diseños complejos y sus correspondientes cargas al cambiar de una pantalla a otra. Este GT6 se centra más en que lleguemos rápido a la carrera con una interfaz rápida, organizada en bloques que muestran claramente el camino a seguir hasta nuestro destino.

 

En Gran Turismo 6 encontramos un catálogo mayor de hasta 1200 coches


Pero hay cosas que nunca cambian y de hecho no queremos que lo hagan. Tal es el caso de las clases de conducción y sus exámenes que son la forma de hacernos al reto que ofrece Gran Turismo. Y es que, cuando te adentras en este seudo-tutorial y compruebas que vas aprendiendo las fórmulas para controlar las curvas, frenadas y adelantamientos, lo encuentras muy necesario. Aunque en parte, esta sexta entrega numerada, le hace un flaco favor a este aspecto del juego. Algo ocurre a la hora de competir con la IA que no termina de convencer. Resulta poco complicado lograr, en un periodo breve de tiempo, vencer a nuestros competidores, que no parecen esforzarse demasiado en evitar que los adelantemos. De modo que la obtención de los carnets queda relegada a mejorar nuestra conducción y a demostrar a nuestros amigos del Network que podemos lograr una buena calificación. Sí, parece que últimamente competimos más por logros que por victorias en el juego.

 

El tema de los estilos de conducción es un punto importante a tener en cuenta cuando nos adentramos en este Gran Turismo 6. Puede que muchos de vosotros jugaseis a los anteriores atraídos por su exigencia, sus tecnicismos y su carácter de simulador. Pareciera que Polyphony se hubiera replanteado esa práctica y hubiera optado por traernos un juego de conducción algo más casual o accesible. No es que Gran Turismo 6 no sea un Gran Turismo, pero a los mandos sentimos como los de Yamauchi nos tienden la mano para que subamos al tren -o mejor dicho al coche. Podemos encontrar esta conducta nada más arrancar el vehículo y notar cómo se comporta de forma más permisiva con nosotros. Además de esto y el hecho de que nuestros rivales -refiriéndonos a la IA- no nos hagan sudar tinta, se ha establecido un sistema de catalogar los coches algo más light. Podemos alejarnos de los nombres técnicos y quedarnos con un sistema de puntuación que nos oriente de un simple vistazo.

 

Los 60 frames por segundo hacen que esta entrega nos de lo que estábamos esperando hacía tiempo


Hay una de las ayudas que se ha puesto de moda en varios títulos y no es más que una constante afluencia de pop-ups en la pantalla indicándonos que hacer a cada momento. Y es como comer bombones, si tomamos uno o dos nos gustan pero si nos comemos la caja, podemos acabar con dolor de tripa. Durante los primeros momentos, lo que trata de ayudarnos y aconsejarnos, se convierte en un “basta, por favor, prefiero estrellarme”. Sin embargo, a medida que avanzamos, van desapareciendo y dejándonos echar a andar.

 

Siendo sinceros, encontramos un Gran Turismo 6 que no deja de ser un arreglo del anterior. Nos invita mucho más a entrar y quedarnos con sus tutoriales y su benevolencia, pero nos genera sensaciones contradictorias. Perdemos en simulación y por tanto esa necesidad de conocer algo de técnica. Además, esta entrega encuentra una dificultad añadida al no haber sido capaz de verse preparada para competir con una nueva generación. Otros títulos del estilo no se presentan de forma espectacular, ocultando las virtudes que Polyphony Digital trae en este trabajo. Lo cierto es que no impresiona cuando vemos ciertas texturas en el suelo o en los vehículos que no terminan de parecer reales. Pero sí tiene algo que destaca, aunque tarde, para un juego de conducción de la generación pasada, se mueve a 60 fps y a una resolución mayor. A pesar de que nos exige cierto escalado podemos decir que, en cuanto a potencia gráfica, Gran Turismo 6 tiene lo que estuvimos toda la generación esperando. Aunque Gran Turismo 6 sí plantea una mejora con respecto al anterior, podríamos preguntarnos si era necesario jubilar a Gran Turismo 5 para dar paso al que tenemos entre manos.

8
/ 10

<< Anterior Siguiente >>