Analisis FIFA 16 ,PC,PS4,X360,XONE

Muchos hubiésemos esperado un catenaccio en toda regla por parte de EA Sports con su nuevo simulador de fútbol, FIFA 16, aprovechando su posición ventajosa durante estos últimos años. Poco arriesgar, más de lo mismo y algunas pequeñas novedades con las que poder hacer algún que otro remate a puerta y con fortuna vencer el partido como siempre, aprovechando sus estrellas y su mayor presupuesto. Pero, quizás porque la competencia está más fuerte que nunca, la nueva entrega no se cierra atrás y apuesta por un estilo ofensivo, plantando cara aunque sin arriesgar lo más mínimo en defensa.

No todo ha sido vendernos lo mismo con un envoltorio algo más bonito que incluye algunas pequeñas características nuevas, como la incorporación de los equipos femeninos o nuevos modos de juego como FUT Draft, sino que se han sabido solventar con soltura todos los fallos que se evidenciaban en la edición del año anterior: muchos problemas con los porteros, con algunos centros y, sobre todo, con una defensa que no estaba a la altura de las circunstancias.  

A día de hoy podemos decir que FIFA 16 ha sabido solucionar todos esos problemas y convertirse así en la entrega más sólida que hemos podido disfrutar en los últimos años. Aún quedan bastantes aspectos por mejorar para sentir que realmente nos encontramos con un juego excelso, pero todos aquellos amantes del fútbol que disfrutan año tras año de esta saga pueden estar más que contentos. Ya no nos meterán goles extraños por culpa de los porteros, ni sufriremos las malas basculaciones de las líneas defensivas que nos vendían ante cualquier jugador rápido. Ya no bastará con galopar por la banda ni con jugar de forma vertical y deberemos elaborar las jugadas o nos costará mucho llegar hasta la portería rival.

Ahora los defensas actuarán como un equipo y no como sujetos individuales que creaban espacios continuamente. Se adelantarán, se retrasarán, entenderán la jugada y actuarán en consecuencia, generalmente haciendo muy difícil avanzar entre líneas por parte del equipo atacante. Muchos de los pases que el año anterior dábamos por hechos este año serán interceptados por los defensas, que se adelantarán o ganarán la espalda de los delanteros sin mayor problema. Hay que elaborar más y cuesta encontrar el camino hacia el gol, incluyendo el de los centros, tiros o remates claros. Esto provoca que sea enormemente satisfactorio para el jugador conseguir hilar una buena jugada con un remate a puerta que acabe en gol, o no.

Quizás, el punto negativo lo seguimos encontrando en la inteligencia artificial, que se empeña en seguir jugando siempre igual sea cual sea el equipo que está controlando. Resta realismo y sin duda es un aspecto a mejorar por parte de EA Sports de cara al año que viene, ya que al final "obligan" a los jugadores a tratar de disfrutar el juego en compañía o bien en el terreno multijugador, donde sí que sabe mostrar todas sus virtudes.

Ultimate Team sigue siendo el modo de juego estrella, con la posibilidad de crear nuestro propio club con estrellas y jugadores de todo el mundo. Conseguir dinero, ir ascendiendo entre diferentes categorías, comprar jugadores o sobres, crear nuestra plantilla, combinar jugadores para intentar tener una química mayor... es una gozada y sin duda muchos jugadores volverán a encontrar horas y horas de diversión. De nuevo, volverán a existir los FIFA Points que pondrán las cosas bastante más fáciles a aquellos jugadores que decidan pagar dinero real por él para poder acceder de forma casi directa a sobres de Oro, por ejemplo, pero en ningún momento serán características vetadas para los jugadores que simplemente decidan ir poco a poco con las monedas del juego.

Quizás, tanto para Ultimate Team como para cualquier otro modo de juego, se echa en falta una mayor libertad táctica. FIFA lleva, desde hace muchos años, pidiendo a gritos una evolución en este sentido. Poder coger a un jugador concreto y situarlo en el lugar del campo que queramos (con sus propias instrucciones, por ejemplo), seguirá siendo imposible, ya que deberemos ceñirnos a algunas de las tácticas predefinidas que se encuentran en el juego. Son numerosas, por supuesto, pero es un engorro tener que variar la táctica al completo en caso de que queramos incluir un mediapunta en lugar de un delantero, por ejemplo.

A nivel de licencias seguirá siendo una gozada, aunque siguen faltando bastantes estadios españoles y un mayor parecido para aquellos futbolistas menos conocidos, pero a nivel gráfico sigue luciendo bastante bien. Los jugadores siguen pareciendo algo artificiales y no ayudan demasiado las animaciones algo robóticas que la franquicia lleva arrastrando durante años, tanto en el terreno de juego como en los vídeos entre jugadas. Todavía estamos esperando que los simuladores de fútbol den un paso al frente más que necesario en el terreno técnico, ya que aunque cumple perfectamente sabemos que se les puede exigir mucho más a las ediciones de nueva generación.

Por lo demás, es una auténtica gozada iniciar el juego y descubrir que es una entrega muy pulida y en la que no encontramos grandes problemas a nivel de juego. Ni porteros ni defensas nos volverán a hacer la vida imposible, lo que unido a la sensación de que los equipos esta vez sí que se comportan como tal, harán de cada partido, jugadas y goles un espectáculo muy satisfactorio. No hubiese venido mal alguna novedad más, o que FIFA 16 hubiese arriesgado un poquito más en defensa, ya que aunque sigue siendo un simulador estupendo continúa dando la sensación de que podría dar mucho más en todos los sentidos.

Pero no se puede negar lo evidente. Si has disfrutado de FIFA durante todos estos años, no lo dudes, FIFA 16 es la edición más completa y mejor acabada de los últimos años.