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Analisis Epic Mickey 2 El Retorno De Dos Héroes ,PS3,WII,X360

Una aventura no muy bien estructurada que aleja a Epic Mickey del plataformas que debería ser.
Domingo 25 de Noviembre de 2012 por Víctor Junquera

Uno de los mejores plataformas de Wii como era el Epic Mickey original lo tenía muy fácil para una buena segunda parte. Con ampliar el universo ya conocido, añadir algún que otro personaje más, nuevas habilidades y el lavado de cara que supone el paso a la alta definición, habría tenido más que de sobra para encandilar tanto a los fans del primero como a quienes se quedaron sin jugarlo por no tener una Wii. Pero no queriendo conformarse con una secuelitis tan simple, a Junction Point les ha podido la ambición y han añadido tantos cambios y tantas novedades en el desarrollo del juego que se les ha ido de las manos hasta hacer un juego peor.

 

La alta definición le sienta muy bien a Mickey, pero no es suficiente.

 

Mucho nos había hecho ilusionarnos Warren Spector al hablar de que en Epic Mickey 2 también tendríamos que tomar muchas decisiones y que incluso el juego se adaptaría al estilo del jugador. Como si de un Deus Ex de plataformas se tratase, pensábamos. Finalmente es verdad que en este juego hay variedad de formas de proceder para avanzar o para conseguir los secretos que plagan el Páramo, pero cuando venimos buscando un juego de plataformas con un buen ritmo como el primero, ver que Epic Mickey 2 es una sucesión de salas en las que encontrar un objeto que pintar o que disolver para accionar un interruptor o hacer volar una pared, una y otra vez, decepciona.

 

La mecánica de pintar o disolver con el pincel mágico se mantiene, pero en la mayoría de ocasiones nos encontraremos lanzando pintura a objetos al azar para ver qué es lo que sí y lo que no se puede modificar con la pintura o saltando entre sitios por los que no se tiene bien claro si se llega o no. Cuando no sólo tenemos la misión principal sino que cada personaje con el que hablemos o cada casa en la que entremos añadirá una misión opcional al diario cuyo objetivo bien podemos tardar en encontrar, terminaremos por olvidarnos de la mitad, entre hacer fotos y conseguir objetos, y peor aún, volviendo al origen para completar la misión que puede hacernos volver muchos, muchos pasos atrás cuando en un juego que por sí solo puede llegar a durar una veintena de horas, lo único que queremos es avanzar y descubrir.

 

Las fases 2D hacen lo posible por compensar la falta de plataformeo del resto del juego.

 

Menos mal que, para quien quiera plataformas, mantienen las fases de desarrollo 2D ambientadas en clásicos de Disney tanto de los primeros años como de temáticas más actuales, y esta vez añaden multitud de caminos a seguir y muchos secretos a conseguir dentro de estas fases, para que tanto quien quiera avanzar directamente como al que le guste rodear y explorar puedan disfrutar del juego. Entre otras novedades también tenemos la parte más cinematográfica del juego, que añade voces originales a todos y cada uno de los personajes (aunque hay alguien que habla de más y acabaréis queriendo silenciar a nuestro compañero goblin que cree que nos indica el camino con repetitivos “¡Tenemos que ir a hablar con XXXXX!” sin indicarnos dónde está esa persona), e incluso números musicales nefastos dirigidos en su mayoría por el Doctor Loco.

 

Pero todo sabe a poco cuando vamos descubriendo que apenas hay zonas nuevas, sino que nos dedicamos a recorrer versiones modificadas de los escenarios del original, una y otra vez las mismas zonas del Páramo, casi como si Epic Mickey no hubiese existido más que para recordar cuando Mickey les salvó de la Mancha. La intervención de Oswald como co-protagonista para el cooperativo obligatorio es otro punto de discusión importante. Jugar acompañado es la mejor forma de disfrutar del juego sin presiones, cooperando cada uno con sus habilidades y experimentando sin prisa, pero cuando Oswald está controlado por la IA, no puede salirse de unos patrones marcados y ni siquiera tenemos un mínimo control sobre sus acciones para experimentar con el salto doble con planeo o con formas de acabar con los enemigos. Sigue unas reglas muy estrictas y tenemos que adaptarnos a ellas en lugar de ser al revés.

 

Electricidad y pintura, hacen falta ambas con buena coordinación para acabar con los enemigos.

 

Donde no tenemos problemas esta vez es con el control, aunque siempre mejor en una versión con control de movimiento. Podemos mover la cámara libremente y el puntero ayuda a darle un plus de precisión, pero todos estos cambios no compensan el empeoramiento general del juego con respecto al original, que hace que este Epic Mickey 2 nos deje una impresión de potencial muy desaprovechado sólo por la ambición de querer atraer a un mayor rango de público con mecánicas que pertenecen a otros géneros. Es una pena pensar en lo que podría haber sido, ya que era una de las pocas franquicias que podría llegar a devolver el esplendor al género de las plataformas 3D, pero en lugar de continuar con el genial planteamiento del primero y hacerse más grande, han querido tomar el camino de satisfacer las necesidades de otro tipo de jugador, convirtiendo a Epic Mickey 2: El Retorno de Dos Héroes, en una aventura no muy bien estructurada.

6.5

/ 10


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