1. Mundogamers
  2. Analisis
  3. PC

Analisis Code Vein ,PC,XONE

Vampiros guapos y armas gordas
Martes 08 de Octubre de 2019 por Adrián Suárez Mouriño

Code Vein es una agradable aventura con un esquema de juego y exploración que parte de los de Hidetaka Miyazaki para luego ir a lo suyo. El combate es similar. Hay distintas armas con distintos pesos, hay un parry, esquivas, stamina, críticos a la espalda y los enemigos son duros. También la exploración pretende ser laberíntica como los juegos de From Software con varias puertas que te llevan de vuelta a la hoguera, aquí representado por una flor brillante. Hay que matar enemigos, quedarnos con los puntos que nos dan a cambio y subir de nivel. Al final de cada área nos encontraremos a un gran boss que se convertirá en nuestra pesadilla durante un par de intentos.

 

Las tres diferencias fundamentales con el autor japonés es que este juego está guiado por una historia que se entrega con cinemáticas constantes, largas y en la que recae todo el peso de la narración. La aventura es lineal para que estas se muestren en el orden correspondiente. Esto alegrará mucho a los que quieren un Souls con una historia que se cuente de forma tradicional. La otra diferencia está en la preparación de nuestras clases. Dark Souls te obligaba a configurar tu personaje sin saber qué retos venían después. ¿Qué has gastado tus puntos en fuerza y te has encontrado un arma genial pero que pide destreza? Pues te aguantas. En Code Vein los puntos se asignan automáticamente, las clases se cambian a voluntad y las habilidades de estas pueden ser transferidas de una a otra; es decir, no hay riesgo, no hay apuesta, no hay prueba y error.

 

También se ha suavizado mucho el nivel de reto. Los Souls son una experiencia primordialmente solitaria. Code Vein te suele permitir, pedir o exigir que vayas acompañado. Es importante para la historia que te quieren contar. Estos guerreros que van a tu lado saben moverse bien, atraer la atención del rival y te dejan mucho espacio para maniobrar.

 

Code Vein no se oculta: quiere ser un Dark Souls para aquellos que les abrumó Dark Souls por dificultad y narración

 

Con todos estas alteraciones sobre la fórmula original, lo que hace Code Vein es entregar un Souls amable, entretenido y directo, donde no importa tanto volverse loco explorando, sufriendo con cada muerte ni sintiéndose idiota por no entender la trama. Code Vein tiene una dificultad moderada, una historia directa y batallas accesibles aunque con cierto reto.

 

La idea que hay tras Code Vein es buena. A mí me apasionan los Souls, pero entiendo que haya gente que la estructura de los títulos de Miyazaki le guste pero que se le haga muy cuesta arriba lo que exige, tanto por el puzzle narrativo que obliga a montar como por su a veces endemoniada dificultad. Por eso, si te encuentras en esta situación, Code Vein te gustará y posiblemente sea una buena entrada para que luego te animes con Nioh, The Surge 2 y también con los Souls.

 

Por desgracia, esta accesibilidad le pasa factura al juego en varios de sus apartados. Si nos acompañan todo el tiempo guerreros tan capaces, no nos permiten sacarle toda la chicha al combate. Podemos equiparnos con velos que alteran nuestras capacidades, llevar con nosotros armas y masterizar nuestras habilidades, pero a las pocas horas de jugar no nos importará tanto meternos en los menús para trastear en ellos, porque ya seremos muy poderosos.

 

Code Vein es bonito en imagen estática, pero tiene serios problemas de cámara y el framerate no va fino

 

Los escenarios son mucho más legibles que otros exponentes del género. Tiene como punto muy positivo que se juega con encontrar unas flores que hacen que el mapa aparezca dibujado. En el minimapa se ven los pasos que hemos dado, de forma que podremos hacer backtracking para recorrer fácilmente el 100% del mapa. El problema es que esta idea choca con la de hacer escenarios a varios alturas, con secretos verdaderamente difíciles de encontrar o que nos pidan desviarnos del camino. El juego quiere que lo encontremos todo, y lo consigue. Quiere ser directo y lineal. Code Vein quiere que llegues a su final sin distraerte tanto.

 

La entrega de la historia también te predispone a ello. En el juego habitamos un mundo que ha pasado por su propio apocalipsis. Somos una especie de vampiros llamados renegados y no hay ya más sangre de la que alimentarse, lo que exige una solución. La trama recorre a los muchos personajes que nos encontramos hablándonos de sus dramas personales en clave de anime. He de reconocer que se me ha hecho grata. No es nada del otro mundo, es previsible, pero es el típico anime que te ves porque te gusta la estética y, sin saber cómo, te lo acabas ventilando.

 

Code Vein demuestra que la fórmula Souls también puede funcionar con una narración tradicional

 

Eso sí, aunque Code Vein se pueda ver bonito en fotos sin movimiento, tiene problemas continuos de framerate, la cámara falla demasiado y nos deja muchísimas veces vendidos. Los enemigos se comportan de una forma rara; es como si fueran más lentos a propósito para que no tengamos que mover el punto de vista demasiado. Hay clipping y los distintos tramos de los escenarios no tienen personalidad distintiva. Muchas veces recuerdan a las mazmorras de un juego de rol en el que importa el diseño de planta en forma de laberinto más que el diseño de paredes y muros.

 

Sé que me ha pasado todo el análisis comparando a Code Vein con otros juegos, algo que he conseguido evitar al hablar tanto de Blasphemous como de The Surge 2 en sus respectivos análisis, pero es que Code Vein es a propósito un Dark Souls anime más accesible. Me hubiera gustado que esa accesibilidad hubiera desembocado en ideas nuevas mejor desarrolladas, porque la verdad es que lo de sentirme poderoso, hábil y más fuerte que los enemigos en un juego a lo Souls es la primera vez que me pasa.

 

Por desgracia, Code Vein no llega a ser notable en nada de lo que se propone. Sin embargo, yo me lo he pasado razonablemente bien pese a sus limitaciones, que acaban siendo muchas. Tomáoslo más como un hack and slash con toques de rol que como un Souls like y lo acabaréis apreciando. Pero si buscáis una nueva perspectiva de Dark Souls como sí lo es The Surge 2, lo aburriréis rápido.

 

Y sí, tiene un editor de personajes. Por su culpa, el personaje tiene que ser mudo y hace que las cinemáticas sean un pelín cutres.

6.5

/ 10


<< Anterior Siguiente >>